En 12 meses cayó en 35.266 barriles diarios la extracción de petróleo crudo de los yacimientos donde opera la petrolera estatal mexicana bajo contratos o asignaciones.

El 2024 arrancó con una reducción en la producción de crudo de Petróleos Mexicanos (Pemex): en enero la estatal extrajo 1,549 millones de barriles diarios, volumen que resultó 2,23% inferior al que tuvo en el primer mes de 2023, según su Base de Datos Institucional.

Esto significó que en 12 meses cayó en 35.266 barriles diarios la extracción de petróleo crudo de los yacimientos donde opera Pemex bajo contratos o asignaciones. Incluso la producción de condensados -que son líquidos de mayor valor asociados en los yacimientos de gas que cuentan con un mercado menos dinámico que el del crudo- tuvo una reducción anual: de 2%, al ubicarse en 280.281 barriles por día, en comparación con el reporte de 285,943 barriles diarios de enero de 2023.

Así, la producción total de hidrocarburos líquidos reportados por la empresa descendió en un año, ubicándose en 1,829 millones de barriles por día, volumen que resultó 2,2% menor al del año previo.

Resaltó en el reporte que por segunda vez desde que Pemex inició con el reporte de extracción de condensados luego de hallar importantes volúmenes en yacimientos terrestres, cayó de un mes a otro la extracción de estos líquidos y en enero fue 2,26% menor que la que tuvo en diciembre de 2023.

De igual manera, la suma de los condensados y el crudo que es el reporte de hidrocarburos líquidos de Pemex cayó mensualmente, en 0,1%, según el reporte de Pemex.

Y únicamente en lo que respecta al crudo, la situación dista mucho de las metas con que prometió el presente gobierno para el cierre de sexenio, ya que al arranque de la administración el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el país volvería al nivel de 2 millones de barriles diarios, lo que no se ve desde 2016.

En cambio, desde el último año del sexenio anterior la producción de crudo de Pemex ha caído 18,8%, lo que significa que produce 359.924 barriles diarios menos que en 2018.

La declinación natura de los yacimientos, así como la falta de inversiones en recuperación secundaria mediante presión, líquidos o gases, o mejorada mediante químicos, junto con poca diversificación de las inversiones han llevado a que en una década la caída en la producción de crudo de la empresa del Estado mexicano sea 38,18% inferior.

Lo anterior significa que Pemex produjo en enero un volumen de 956.748 barriles menos que lo que extraía en 2014, en que todavía reportó 2,5 millones de barriles diarios en el primer mes del año.

Contratos también tienen caída 

La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) informó que en enero un total de 20 contratos petroleros aportaron un volumen de 185.600 barriles diarios de petróleo, lo que implicó una reducción de 6,5% en término anuales, en comparación con los 198.621 barriles por día de enero del año anterior.

Desde que iniciaron las operaciones de empresas privadas con contratos en México, en 2016, es el primer año en que decrece la producción de contratos entre un año y otro.

Lo anterior, previo a que Pemex presente su informe anual de 2023 el próximo martes.