A propósito de esto, Horacio Llovet, de Nawaiam afirmó que “estamos en un entorno cambiante, especialmente, en el ámbito laboral”.

Aunque el currículum es la carta de presentación para cargos laborales, y hace varios años que era habitual incluir una fotografía junto con ciertos datos personales, ha habido algunos cambios sobre este ámbito que buscan evitar la discriminación laboral.

Hace poco más de 10 años que en Chile se estableció que los empleadores tenían prohibido publicar avisos que vulneraran la igualdad de oportunidades de los postulantes, solicitando fotografía, además, de datos como edad, sexo y buena presencia. Ahora, en pleno 2021, los diputados de RN, Francisco Eguiguren y José Miguel Castro, presentaron un proyecto de ley para prohibir que se pidan currículos con fotografías o antecedentes de postulantes.

Denominada “Ley Victoria”, la iniciativa que busca impedir la discriminación, surge a raíz de una serie de denuncias de personas que dijeron haber sido discriminadas por su fotografía, origen social, sector donde viven o si su colegio en la
enseñanza básica era público o privado.

El proyecto vuelve a poner sobre la mesa el papel del CV y cómo están cambiando las exigencias en el entorno laboral. Horacio Llovet, cofundador de Nawaiam -plataforma de videojuego aplicada a los RR.HH.-, afirmó que “estamos en un entorno cambiante, especialmente, en el ámbito laboral. Antes era una búsqueda unilateral, desde las empresas, pero el mundo se remodeló y las personas también están buscando dónde trabajar”.

A su vez, la manera en que se elabora la hoja de vida también ha evolucionado, ya que hoy se habla de CV ciego, por ejemplo. Además, en las empresas quieren ver quién es la persona, centrándose en las habilidades y competencias, dejando de lado datos como los apellidos, la universidad, entre otros. Llovet aconsejó que “los candidatos se focalicen en sus diferencias en relación a los otros postulantes, evitando centrarse en las competencias duras, como conocimiento técnico, idiomas, manejo de software”.

En el caso del proyecto de “Ley Victoria”, los diputados indicaron que si se llega a convertir en ley, será la Inspección del Trabajo quien se encargue de fiscalizar y que de llegarse a incumplir es posible arriesgarse a sanciones de los códigos 506 y 505 del Código
del Trabajo.