Latinoamérica, uno de los ecosistemas más interesantes para las startups españolas, es bastante heterogéneo y tiene en Chile a su país más destacado.
Por Jorge Cartagena para Think Big. Internacionalizar un negocio es el anhelo de muchos emprendedores. Sin embargo, hay que investigar demasiado para saber qué país podría ser el más indicado.
“Si mi startup soluciona un problema específico, debes preguntarte ¿este mismo problema se produce en otras partes del mundo? Si la respuesta es sí, piensa desde el principio en un mercado global, aunque sin perder las oportunidades que tu mercado local, seguramente más asequible, puede ofrecerte”: Jordi Torras, CEO de Inbenta, una startup dedicada 100% al software as a Service (SaaS) explica su experiencia con la escalabilidad de su negocio. “La única manera de tener éxito en el mundo SaaS es especializarte en solucionar un problema concreto, y ser el mejor”.
Torras también ha querido destacar otro factor importante en la internacionalización de una empresa: la formación del equipo. “Como parte del proceso de selección, incorpora desde el principio perfiles de diversos países, lenguas y culturas. La diversidad en la empresa, aunque puede ser compleja de gestionar inicialmente, acaba siendo una ventaja competitiva”.
Una vez preparada una buena estrategia de internacionalización queda una pregunta muy importante a la que responder: ¿cómo puedo saber a qué país me tengo que dirigir para expandir mi startup? Para dar respuesta a esta pregunta, Valentín Fernández García, director global de Desarrollo de Negocio, Partnerships y Comunicación de Telefónica Open Future_, ha hecho un repaso de las características de los ecosistemas de emprendimiento más relevantes que existen a nivel global.
Latinoamérica, uno de los ecosistemas más interesantes para las startups españolas, es bastante heterogéneo y tiene en Chile a su país más destacado gracias al desarrollo que ha experimentado a pesar de tratarse de un mercado pequeño. El otro ecosistema en franco crecimiento sería Colombia, que cuenta con gran apoyo gubernamental y cuyas startups están especialmente presentes en el sector publicitario.
Brasil, México y Argentina son otros ejemplos de mercados interesantes por tamaño. En el caso de Argentina, sobre todo, por los beneficios que pueden surgir debido a los recientes acontecimientos políticos-económicos.
Si nos trasladamos a Asia, China es un mercado en plena ebullición desde el punto de vista de emprendimiento, siendo su gran baza el tamaño del mercado. Espuntero en e-Commerce o gaming y tienen gran capital humano (muchos de sus profesionales se forman en universidades extranjeras y luego regresan). Gracias a las particularidades socio-políticas del país consiguen crear compañías muy grandes que suponen una importante competencia de otros modelos probados en Occidente: Alibaba, Baidu, etc.
Corea es un mercado similar en tamaño al español aunque algo más desarrollado, especialmente en startups relacionadas con electrónica, car connected o devices, y se benefician de los ecosistemas que abanderan grandes corporaciones como Samsung, LG, Huawei y grandes fabricantes de coches como Kia o Hyundai.
Por último y ya en Europa, Finlandia es un mercado pequeño pero al mismo tiempo es el más desarrollado de todos, motivo por el que las startups finesas ven la internacionalización como una salida natural. Es significativo que muchas de las startups creadas deriven de profesionales que trabajaron en Nokia y después decidieron emprender por su cuenta, mientras que juega a su favor el magnífico sistema educativo que poseen. De hecho, los principales modelos de negocio que surgen de este país, y los más potentes, son los relacionados con la educación, eHealth, software, juegos, etc.
Este post se ha publicado originalmente en el blog de Open Future_
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