Unresonable México es el Big Brother social.

Este viernes 5 de septiembre concluyeron las cinco semanas de la primera generación de Unreasonble México, la aceleradora que apoya emprendedores que combaten problemas sociales o medioambientales, encabezada por Raúl de Anda, Luis Cabrera y José Medina.

El objetivo era que a través de un modelo muy sencillo, en el que se reunieran 15 emprendedores en una misma casa en Aguascalientes (muy al estilo de un Gran Hermano), donde vivieran juntos cinco semanas y compartieran tiempo, comida y dormitorios con 50 mentores; los equipos aceleraran el impacto que están provocando en cada una de sus áreas

Luego de que 156 emprendedores aplicaran de 31 Estados del país y solo 15 fueran seleccionados, tuvieron que echar mano de Fondeadora, para juntar el dinero que necesitarían durante su estancia en el Instituto.

Sólo 11 lo lograron y con ello, a través de cinco semanas, pudieron compartir tiempo, experiencias y obtener aprendizaje de mentores como Tom Chi, Arturo Galván, Banks Benitez, Teju Ravilochan, Vicente Fenoll, Martha Smith, Pepe Villatoro y Rafa Smith y con aliados como Crowdfunder México, Promotora Social México, Prospera, Startup Weekend, Siempre Verde, Fondeadora, Activo Red Sustentable, Ángel Ventures México, Jardín de Innovación, Fundación Proempleo y más.

Entre mentorías, pitches, talleres, dinámicas de integración, tiempo libre para trabajar, entrevistas o simplemente tomar alguna bebida y compartir una carne asada con la nueva familia, el tiempo transcurrió entre el viernes 1 de agosto y el viernes 5 de septiembre.

Del 31 de agosto al 2 de septiembre, Dinero en Imagen tuvo la oportunidad de conocer a los emprendedores de Unreasonable México en la penúltima etapa del instituto en San Miguel de Allende, Guanajuato, y echar un vistazo a proyectos totalmente irrazonables como:

-Clases de artes marciales a niños de escasos recursos pagadas con horas de estudio.

-Creación de empleos en la sierra norte de Puebla en donde se conjuntan dos mundos en una prenda: la moda y las tradiciones de comunidades indígenas en camisas para hombre y mujer.

-Brindar acceso a agua segura, para su consumo sostenible, mientras se generan empleos locales.

-Apoyo a familias para que accedan a servicios de salud (como operaciones) con planes de pre-compra simples y personalizados.

-Creación de bicicletas híbridas de alta potencia.

-Un nuevo producto que quiere combatir los problemas de salud, un sustituto de harina con 60% menos grasa.

-Emprendedores que detonan el desarrollo de comunidades y la conservación de sus bosques con ecoturismo vivencial y consultoría para gobiernos y empresas.

-Irrazonables que comparten riesgo con los campesinos, empoderándolos y generando con ellos modelos más rentables en la cosecha de chía y amaranto.

-Dos jóvenes que organizan viajes altruistas, donde los viajeros colaboran con ONGs y fundaciones.

-Un Monedero Ecológico que promueve la cultura del reciclaje de residuos sólidos con el fin de recaudar recursos para las comunidades más vulnerables.

-Emprendedores que transforman fundaciones en empresas sociales, para que eliminen su dependencia de donativos y así ayuden a más personas por más tiempo.

A pesar de que la palabra ‘irrazonable’ puede sonar a todo menos a proyectos enfocados, de fondo y con causa, ‘irrazonable’ sí define la personalidad de quienes emprenden; aquellos que tienen un pensamiento no común y encuentran soluciones creativas y disruptivas para generar empleos y ayudar a comunidades necesitadas en el país.

Acá el video sobre la iniciativa.