La falta de salud puede afectar en la productividad de las personas y la economía familiar, al encarar la incapacidad y la reducción de ingresos por enfermedad o accidente.
Una de las responsabilidades de la cabeza de familia es que sus seres queridos estén protegidos ante cualquier accidente o enfermedad; sin embargo, la falta de cultura en temas de ahorro o seguros hace difícil estar preparados para una eventualidad como ésta. Hoy en día, la prevención es algo a tener en cuenta para evitar problemas en el futuro.
La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) explica que la falta de salud puede afectar en la productividad de las personas y la economía de la familia al encarar la incapacidad y la reducción de los ingresos por la enfermedad o accidente.
Por lo anterior, Paulino Decanini, presidente ejecutivo de Sis Nova, explica las diferencias de dos productos que se suelen confundir, el primero es el seguro de salud o también conocido como de gastos médicos menores y el otro es el de gastos médicos mayores.
“El gasto médico mayor es una descripción inexacta del producto porque si usted esquematiza lo que abarca la atención médica que va desde la medicina preventiva, la medicina del primer contacto y la parte de la medicina hospitalaria, éste cubre exclusivamente la parte hospitalaria. Por otro lado, el mal llamado gasto médico menor abarca desde la prevención hasta la parte hospitalaria, entonces tiene una cobertura mucho más amplia desde la parte de vista del usuario”, abundó.
Por su parte, GNP explica que ese tipo de seguros (de gastos menores) son preventivos y están enfocados a la conservación de la salud, los de gastos médicos mayores son de tipo más correctivo. Incluso hay que tener presente que actualmente las leyes prohíben que estos últimos cubran costos de medicina preventiva.
Asimismo, indicó que existen varias instituciones que ofrecen este tipo de póliza. Al contratarlo usted tendrá acceso a consultas de primer contacto, médico especialista, estudios simples de laboratorio, además de medicina preventiva con el único objetivo de que las personas disminuyan riesgos en su salud.
Según el especialista, el seguro de gastos médicos mayores en México fue diseñado para que las personas no pierdan su patrimonio ante un problema grave de salud en la familia.
“Los dos son seguros muy buenos. Desde el punto de vista de la problemática en México y de las necesidades del usuario, es mucho más importante el de salud (...) en el diseño del gasto médico mayor no hay un tema de cambio en el estilo de vida, cultura en salud, no hay medicina preventiva, de primer contacto, para poder tener acceso al diagnóstico y, una vez que se tenga acceso a éste, definir qué camino toma el paciente. Todos estos componentes que le menciono sí están contemplados en el de salud”, comentó.
Por otro lado, explicó que actualmente los indicadores de salud en México están muy bajos y una de las causas importantes es que no se tiene un tema de acceso a la salud desde la prevención, lo que lleva a que la mayor parte de los problemas del país se diagnostiquen de forma tardía, lo que aumenta el costo de la atención y, por lo tanto, menos personas tienen acceso a servicios adecuados.
La AMIS refiere que el costo de las enfermedades ha tenido un incremento promedio anual de 8% en los últimos dos años, entre las que destacan las malformaciones congénitas, enfermedades del sistema nervioso y endócrinas, nutricionales y metabólicas, que han aumentado el costo de sus tratamientos en más de 10% anual.
“Lo más importante es analizar las ventajas que ofrece cada una de las aseguradoras ante los riesgos. Hay personas que obtienen grandes beneficios con una póliza de seguros de gastos médicos menores, sobre todo cuando tienen la experiencia de usarlos. Por ejemplo, puede resultar muy valiosa para personas que requieren consultas con frecuencia como mujeres embarazadas, o quienes tienen niños o ancianos que requieren mucha atención médica, por lo que el precio pagado por esta póliza indudablemente se verá compensada con todos los servicios”, refiere GNP.
