Es importante mantener una dieta nutritiva para que su bebé reciba las vitaminas que necesita para crecer y desarrollarse saludablemente.
Las glándulas mamarias se preparan desde la adolescencia para producir leche en el momento en el que una mujer se convierte en madre. Esto es un proceso natural de los mamíferos por medio del cual no solo se crea un vínculo afectivo entre una mamá y sus crías, sino que también es esencial para la el desarrollo del recién nacido.
La leche materna ofrece todos los nutrientes que un bebé necesita durante sus primeros seis meses de vida. Además, al contener inmunoglobulinas, da protección a su sistema inmunitario de manera natural, evitando enfermedades como catarros, bronquiolitis, neumonía, diarrea, otitis, asma, obesidad, alergias y diabetes. Además, es un alimento ecológico, pues no necesita fabricarse, envasarse o transportarse.
Pero ¿cómo incrementar estas ventajas a través de la dieta durante el periodo de lactancia? Esta es una pregunta que muchas madres se hacen a la hora de dar pecho a su bebé, pues es importante potenciar algunas sustancias, así como evitar otras, para transmitirle las vitaminas que necesita para madurar.
El consumo de alimentos que se recomienda durante la lactancia es similar al del embarazo. Una dieta balanceada que incluya vegetales, frutas, granos y proteínas magras suple los elementos básicos para la producción de leche. Estas son algunas recomendaciones para mantener una hábitos alimenticios nutritivos durante la lactancia.
La hidratación es clave
Mientras está lactando, una madre necesita beber alrededor de ocho o nueve vasos de agua al día. Dependiendo de su edad y actividad física, esta cantidad puede aumentar. Según el portal de maternidad BabyCenter, “si su orina es clara o tiene un color amarillo pálido, esa es una buena señal de que usted está bien hidratada”.
Más calcio
No se trata de beber leche para producir leche, pero sí de reponer el calcio en el cuerpo, que se agota debido a la lactancia. Según la organización Baptist Health South Florida, las madres pierden entre tres y cinco por ciento de su densidad ósea mientras están lactando. Alimentos como los yogures, el tofu, las sardinas, espinacas y almendras pueden ser una fuente de este mineral, fundamental para cubrir las necesidades alimenticias tanto de la mamá como de su bebé.
¿Cuánto comer?
Aunque el estómago es quien dicta cuándo y cuánto alimento ingerir, se debe tener en cuenta que el cuerpo de una mujer lactante necesita entre 2000 y 2500 calorías al día, es decir, 500 calorías más que una mujer que no atraviesa por este periodo. Esto equivale a un sánduche o dos refrigerios pequeños extra durante la jornada.
No se le olvide la proteína
Fríjoles, nueces, pescado y huevos son alimentos ricos en proteínas, las cuales deben estar presentes en cada comida del día. “El incremento recomendado en el consumo de proteína durante la lactancia ha sido estimado entre 15 gramos/día, basado en una concentración de proteína en la leche materna de 11 gramos/litro”, según la U.S. National Library of Medicine Medical Institutes of Health.
Nada de cigarrillo o café en exceso
Sustancias como la nicotina y la cafeína pueden ser nocivas para el desarrollo del bebé. No olvide que a través de la leche materna se transmiten tanto los nutrientes como los elementos perjudiciales para la salud.
Variedad en los sabores
Los sabores de los alimentos que la madre consume pueden transmitirse a través de la leche materna. De esta manera, si usted le introduce ciertos sabores a su bebé, será más probable que los acepte cuando comience a ingerir alimentos sólidos.