En entrevista con AméricaEconomía.com, Guillermo Selva, nuevo decano de Incae Business School, comentó los principales retos y desafíos que se vislumbran para la escuela de negocios en 2010.
Potenciar la investigación, fortalecer las relaciones con escuelas internacionales e innovar en los cursos de MBA y Executive MBA, son algunas de las iniciativas que busca promover Guillermo Selva, nuevo decano de Incae Business School.
El directivo, quien comenzó a ocupar su cargo a comienzos de este año, se ha desempeñado a lo largo de su carrera como investigador, instructor, profesor del área de gerencia de operaciones y decano asociado de los programas de maestrías.
En conversación con AméricaEconomía.com, Selva comentó los futuros retos y desafíos que se vislumbran para la escuela de negocios este 2010.
-¿Cuáles serán los principales desafíos que enfrentará Incae este año?
El principal desafío de Incae Business School es mantener la calidad e innovación de su enseñanza e investigación para continuar como la escuela número 1 de América Latina. Este es un reto muy grande, ya que debemos priorizar la asignación de nuestros recursos en aquellas áreas que nos permitan los mayores aportes en la investigación de los temas de actualidad, al mismo tiempo que apoyen la adaptación de nuestros pensums de los programas de MBA y Executive MBA a las nuevas realidades que vivimos. Otras metas importantes tienen que ver con el mantenimiento del crecimiento del número de estudiantes, así como con la recuperación de los participantes en seminarios ejecutivos, estos últimos disminuidos en 2009 por los recortes en las empresas a los programas de capacitación, debido a la crisis económica.
-¿Sintieron mucho los efectos de la crisis? ¿Cómo piensan revertirlos?
Los efectos de la crisis los hemos sentido en la disminución de actividades e ingresos de la educación ejecutiva y en los niveles de donaciones que habíamos estado recibiendo. Esperamos que la recuperación de los mercados nos lleve a alcanzar y mejorar los niveles anteriores en esos aspectos. Por eso, posiblemente, el desafío más importante es el de la innovación del pensum, de la transformación de la organización y de la facultad para enfrentar los nuevos desafíos. El mundo cambió por efecto de la crisis, pero también tenemos enfrente a las nuevas generaciones, que tienen orientaciones diferentes a las de generaciones anteriores, piensan diferente, aprenden de forma diferente, usan intensamente las nuevas tecnologías y se conducen impulsados por diferentes valores.
-¿Qué elementos quiere potenciar en su gestión?
Estamos empeñados en fortalecer la presencia de Incae como una organización referente en los países que servimos. Nuestra misión nos orienta a potencializar nuestros esfuerzos en pro del crecimiento y bienestar de la región en que operamos, de allí que sea muy natural que nuestras actividades y los resultados que obtengamos sirvan de guía a organizaciones ligadas con el desarrollo de nuestros países. También debo centrar algunos esfuerzos importantes en asegurarnos que contamos con los mejores procesos de apoyo a las maestrías, en los sistemas de reclutamiento, admisión, career services y programas internacionales.
-¿Considera que se requieren algunos cambios en la gestión de Incae?
Se requerirán algunos cambios importantes para llevar a cabo ese fortalecimiento de la investigación y la adaptación de los nuevos pensusm en los programas de maestrías. Para suerte nuestra, esos cambios ya los hemos venido debatiendo en el seno de la facultad y con nuestro personal administrativo. Algunos cambios son sensibles, tales como el sistema de evaluación del desempeño de la facultad, con el objeto de tener una producción en mayor calidad y número de las publicaciones en “outlets”, académicos de primera. Además está la necesidad de incorporar nuevos temas, el uso de nuevas herramientas en los programas de maestrías, para los cuales algunos miembros de la facultad deberán profundizar y experimentar con nuevos enfoques, nuevas metodologías de enseñanza y nuevas herramientas de apoyo.
-En su calidad de decano asociado de maestrías de Incae, usted desarrolló fuertemente un proceso de internalización de la escuela y reforzó las relaciones con las escuelas socias. ¿Continuará con esa iniciativa que ha sido tan exitosa?
Efectivamente, continuaremos dando un gran impulso a las relaciones internacionales con las escuelas socias, manteniendo las que tenemos y abriendo unas cuantas otras en forma selectiva. Consideramos que existen grandes beneficios para nuestros profesores y estudiantes con relaciones fuertes con socios internacionales. Nuestros estudiantes se benefician de su cercanía con otros estudiantes que provienen de países diversos, y que comparten sus culturas, experiencias, formas de pensar e interpretar el mundo de los negocios, enriqueciendo los procesos de aprendizaje. De igual forma, o con mayor exposición, lo hacen nuestros estudiantes que participan en los programas de intercambio o de doble titulación en nuestras escuelas socias. Y también diría que nuestras escuelas socias se han beneficiado con los aportes de nuestra facultad.
-¿Cuáles son las nuevas perspectivas en materia de educación ejecutiva?
En los próximos años haremos esfuerzos especiales para atraer grupos de los programas de Executive MBA de nuestras escuelas socias y de otras escuelas amigas. Ya en el pasado recibimos grupos de Rotterdam School of Management, el año pasado de Cranfield University, que regresarán en el 2010, y estamos en conversaciones para recibir grupos de UCLA y de otras escuelas. Otras iniciativas a las que les daremos atención serán las de fortalecer las relaciones con nuestras escuelas socias de Asia y ampliar el número, e intentar con ellas las acciones exitosas que logramos con algunas de las escuelas de EE.UU. y Europa. Nos parece que todas estas iniciativas contribuyen a reforzar la imagen de Incae como una escuela líder en América Latina, en el mundo cada vez más difícil de las escuelas de negocios.
