Investigadores del Centro de Biología Molecular han demostrado que la ingesta de un suplemento de L-arginina controla eficazmente en ratones la replicación del parásito que produce la enfermedad de Chagas, reduciendo drásticamente la mortalidad.
La enfermedad de Chagas, causada por el protozoo parasito Trypanosoma cruzi, afecta a varios millones de personas en Latinoamérica y actualmente se encuentra en zonas no endémicas como España. Presenta una fase aguda, para la que existe tratamiento farmacológico, aunque con fuertes efectos secundarios. La fase crónica de la enfermedad es normalmente asintomática durante décadas, pero luego, en aproximadamente un 30% de los casos, se desarrolla la cardiomiopatía chagásica crónica.
En un trabajo publicado en la revista PLOS Neglected Tropical Diseases, investigadores del Centro de Biología Molecular (CBMSO, UAM-CSIC) descubrieron en ratones que, durante la infección con T. cruzi, se produce un descenso en los niveles de L-arginina (L-arg), producida por la sobreexpresión de la enzima arginasa 1 (Arg1) en células mieloides supresoras (MDSCs). Además, identificaron que la expansión e infiltración en corazón de estas células durante la infección está asociada a la susceptibilidad de la infección.
La L-arg es sustrato de la enzima óxido nítrico sintasa inducible (iNOS), también incrementada en las MDSCs. La iNOS convierte la L-arg en citrulina y óxido nítrico (NO), siendo este último necesario para eliminar el parásito.
Por otro lado, los investigadores observaron que la infección produce un aumento de dimetilarginina asimétrica (ADMA), como resultado del catabolismo de proteínas con residuos arginina. El ADMA es un inhibidor de la iNOS, por lo que a pesar de que la expresión de iNOS incrementa a causa de la infección, la enzima inhibida no es capaz de producir NO suficiente. Esto unido a la falta de sustrato L-arginina, inhibe la producción de NO necesario para controlar la infección.
Marcador de enfermedad cardíaca
Es de destacar que el bajo ratio L-arg/ADMA se considera un marcador de enfermedad cardíaca en otras cardiomiopatías. “El suplemento de L-arginina en la ingesta produjo un efecto beneficioso, reduciendo drásticamente el número de parásitos y evitando la muerte de los ratones por la infección. Además, la función cardiaca, alterada en los ratones infectados, también mejoró con el suplemento de L-arginina”, afirman los investigadores.
“La relevancia de nuestros resultados radica en que, por un lado, los niveles de L-arginina/ADMA podrían ser marcadores de pronóstico de la cardiomiopatía chagásica. Y por otro, que siendo la L-arginina un suplemento alimenticio de uso común, podría ser de utilidad como tratamiento coadyuvante de las infecciones agudas, administrándose como complemento a la medicación habitual, e incluso podría permitir reducir la dosis del fármaco con el objeto de evitar los fuertes efectos secundarios”, detallan.
El trabajo fue llevado a cabo por los grupos de Manuel Fresno y Núria Gironès del CBMSO, en colaboración con el grupo de Susana Gea del Centro de Investigaciones en Bioquímica e Inmunología (CIBICI-CONICET) de Córdoba (Argentina), y el grupo de Héctor Omar Rodríguez-Angulo del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), Caracas (Venezuela).