La imposición de manos canalizando la "energía vital universal", o reiki, puede mejorar la calidad de vida de pacientes con cáncer, al reducir su ansiedad, depresión y fatiga, según expertos de la Universidad de Huddersfield, en el Reino Unido.
El reiki es una técnica japonesa, no científica, que sostiene que las manos de un experto pueden canalizar una supuesta "energía vital universal" que, al ser impuestas sobre una persona produce efectos positivos sobre su salud, es controvertida en Occidente.
Sin embargo, dos investigadoras británicas han recogido evidencias preliminares de que el reiki tiene la capacidad de mejorar el bienestar psicoemocional y podría ser una herramienta beneficiosa para la autogestión de la calidad de vida en las personas con cáncer.
Las doctoras Serena McCluskey y Maxine Stead, y la profesora Marilynne Kirshbaum, han efectuado un estudio de este método en la Universidad de Huddersfield (www.hud.ac.uk) en el Reino Unido y, en base a sus resultados, creen que el reiki, debería estar disponible como terapia complementaria para los enfermos de cáncer en el Servicio Nacional de Salud (NHS) británico.
En concreto, indican que el reiki "podría mejorar la calidad de vida de pacientes con cáncer al reducir sus niveles de ansiedad, la depresión y la fatiga".
El proyecto, denominado An exploratory study of Reiki experiences in women living with cancer, lo dirigió McCluskey, investigadora en Psicología Aplicada y Salud en la HUD, y participó Stead, que tiene una formación académica en la investigación oncológica psicosocial, es una practicante de reiki y dirige un centro de rehabilitación integral en Huddersfield . (www.alexandrahouse.org.uk) .
"No estamos sugiriendo que podemos establecer la eficacia científica del reiki, pero pensamos que se necesita más investigación sobre esta práctica", señala la doctora McCluskey, que espera poder ampliar este trabajo en el futuro.
Ayuda para salir de la sombra
Durante un año, las investigadoras entrevistaron a diez mujeres que habían recibido terapia de reiki en Huddersfield y descubrieron que las pacientes referían beneficios tales como una liberación de tensión emocional, una mayor claridad mental respecto del cáncer y sentimientos de serenidad y relajación, que duraban semanas.
"Esta terapia realmente les proporcionó un escape de lo que estaban pasando estas pacientes que, a menudo, eran sometidas a una gran cantidad de tratamiento y a quienes el reiki les dio un respiro y pareció ayudarles a afrontar la situación y sacarlas del estado sombrío en que estaban sumidas!, según las investigadoras.
Las doctoras McCluskey y Stead, eran colegas de la Universidad de Leeds, en la Unidad de Investigación en Oncología Psicosocial y la Unidad de Ensayos Clínicos, donde investigaron la calidad de vida de los pacientes.
Debido a los métodos más eficaces de diagnóstico y tratamiento, las personas ahora viven más tiempo con cáncer y no van con frecuencia al hospital, por lo que a menudo buscan opciones, fuera del tratamiento médico normal, que les ayuden a hacer frente a los efectos de vivir con la enfermedad, como depresión, ansiedad, fatiga y el dolor, de acuerdo a McCluskey.
"Somos conscientes de las críticas sobre la evidencia empírica, la validez y la credibilidad de reiki, así que hicimos una revisión de la literatura científica sobre el tema y vamos a publicar los resultados de ese trabajo", explica McCluskey.
"No sabemos exactamente la razón de que las aves migren hacia el otro lado del mundo y regresen al mismo lugar todos los años, pero puede ser que un día podamos explicarlo. Lo mismo podría pasar con el reiki", añade la doctora Stead.
Bálsamo psicológico y emocional
La doctora Maxine Stead, que participó en este estudio de Universidad de Huddersfield, explica en una entrevista con Efe, el efecto aparentemente positivo del reiki en estas mujeres con cáncer.
Sobre cuáles podrían ser las aplicaciones prácticas o clínicas de esta investigación, la doctora indica que "el reiki es una terapia complementaria valiosa para las personas con estos problemas, al ayudarleas emocional y físicamente".
Además de estos beneficios señala que "los resultados de nuestro estudio sugieren que el recibir reiki también ayudó a las participantes en la investigación a mantener su calidad de vida y a no centrarse solo en el miedo y en pensamientos negativos".
"Por lo tanto, el reiki apoyó los mecanismos psicológicos para enfrentarse a la enfermedad", según esta terapeuta británica que dirige el Alexandra House Holistic Health and Well-being Spa, en Huddersfield.
Según Stead, los participantes en esta investigación habían recibido, en promedio, 4-6 sesiones de reiki después del tratamiento para el cáncer e informaron que, haber recibido ese tratamiento de forma regular, "parecía tener en ellas un efecto acumulativo".
"Por lo tanto, creemos que recibir reiki de forma regular puede ser una herramienta útil para vivir con cáncer", remacha.
Acerca de cómo se podría explicar el efecto que ha producido a las pacientes, la doctora comenta a Efe que "el reiki es un tratamiento muy suave, durante el cual el cliente/paciente se acuesta y el terapeuta coloca suavemente sus manos sobre las diferentes partes del cuerpo de la persona".
"Se trata de una técnica muy calmante para la mente y el cuerpo y facilita una tranquilidad y una relajación profunda, que ayuda a una reducción de la ansiedad y la depresión", prosigue.
"Esta relajación profunda también ayuda a la gente a dormir, ayudando así a reducir cualquier fatiga", explica.
"Además, al ser un tratamiento de energía natural, el reiki también contribuye a aumentar los niveles de energía, lo cual también facilita una reducción de la fatiga", concluye Stead.
* Reportaje EFE