Un estudio elaborado por ZonaJobs reveló que el 80% de las ofertas de trabajo, excluye a personas que sobrepasan esta edad.
La tendencia a contratar personas jóvenes se ha impuesto por sobre la capacidad y la experiencia de los mayores de 45 años, que hoy pelean por reinsertarse en el mercado laboral. De hecho, el 80% de las ofertas de trabajo excluye a profesionales que sobrepasan esa edad. Así lo reveló un estudio elaborado por la compañía latinoamericana experta en búsqueda de empleo, ZonaJobs, que realizó una investigación para dimensionar el tamaño de la problemática.
Según el sondeo, un profesional de 25 años puede postular al 80% de los avisos laborales; uno de 35 al 60%, uno de 45 al 20% y uno de 55 sólo al 5%. "El límite de edad es el problema. Las empresas tienen implícito un modelo mental que las lleva a establecer rangos de edad menores a los que en realidad necesitan. Consecuentemente se excluye a personas que pueden realizar un trabajo mucho mejor", dice Daniel Serra, gerente general de ZonaJobs.
"Las empresas seleccionan talentos en base a un perfil determinado, que generalmente cuenta con un límite en el rango de edad. Esto se debería a varios factores. Por una parte, la curva de aprendizaje va en bajada, al menos respecto de la velocidad de respuesta esperada. Por otra, los patrones de comportamiento tienden a ser más flexibles en candidato jóvenes, quienes están más dispuestos a aprender nuevos conocimientos e innovar", explica Carmen Gloria Segovia, coach y directora ejecutiva de Reinventa. "Junto con esto, las personas de menor expertise, van a demandar menor renta", agrega.
De acuerdo al estudio, la problemática se incrementa aún más si se considera que los mayores de 55 años casi no usan Internet, y mucho menos buscan trabajo por este medio. Es más, apenas el 5% de esta población navega en la web para encontrar empleo. En cambio, en la población de 25 a 34 años, el 54% utiliza el servicio online para este propósito. Este factor presentaría una disyuntiva para quienes tienen más de 55 años, ya que con el avance de las tecnologías, los portales de empleo han capturado todo el mercado de búsquedas laborales.
Para Roger Marull, gerente general de Meta4, los estereotipos son el principal problema que enfrentan los profesionales maduros. "Los empleadores al momento de justificar por qué no contratan a este grupo de personas, lo hacen diciendo que son poco flexibles, de menor productividad, con falta de adaptación a nuevos ambientes, resistencia a los cambios, faltos de reciclaje profesional, entre otras razones. Si bien éstas son más propias de las personalidades y no de un grupo etario, los profesionales mayores de 45 años deben demostrar con hechos que no están limitados por estas características", dice.
No obstante las bajas estadísticas, hay compañías que ya se animan a contratar personas mayores. El 43,1% de esas búsquedas corresponde al área de ventas y comercial (puestos de telemarketing), el 7,2% a puestos operativos, el 4,4% al área de salud, y el 4,2% a producción. También las áreas de química, bioquímica, sistemas y tecnología, ingeniería, administración y secretarias se encuentran entre las que ya se atreven a incorporar empleados de esa franja etaria.
Todavía servimos. La Asociación Civil Diagonal, asociación sin fines de lucro que desde 2001 trabaja en la problemática del desempleo, junto a ZonaJobs, lanzó el sitio www.todaviaservimos.com, dedicado a generar conversación sobre la cesantía en mayores de 45 años. También está diseñado a los familiares y amigos de personas desempleadas, y a las empresas para que se interioricen sobre este tema e incorporen buenas prácticas al respecto. "La idea fue crear un portal con las siguientes características: fácil de navegar, interactivo y que invite a la participación", comenta Daniel Serra.
Tomás Olivieri, director de la asociación, explica que las personas mayores de 45 años que buscan trabajo se sienten totalmente discriminadas por el mercado y por la sociedad en general. "Es muy triste y genera mucha impotencia, ver como cada vez son más las personas que teniendo muchísima experiencia para aportar quedan completamente excluidas. Se habla mucho de políticas de integración y diversidad, pero mientras sigamos promoviendo un mercado en donde el 80% de las ofertas son para menores de 45, lamentablemente seguiremos siendo una sociedad ignorante y exclusiva que hace culto a la juventud denigrando y discriminando a las personas mayores".
A juicio de Roger Marull, "el profesional maduro, tiene mucho que ofrecer a las organizaciones, como experiencia, estabilidad y madurez emocional y económica, pero debe complementar estas ventajas demostrando, de alguna forma, que los estereotipos no son ciertos en su caso y mostrarse como una persona interesada en asumir nuevos desafíos, crecer profesionalmente, reciclarse, cuestionarse y relacionarse en entornos nuevos, rompiendo los paradigmas que juegan en su contra".
Por su parte, el gerente de ZonaJobs sostiene que la problemática no se limita al tema de la edad, y que es necesario revertir este modelo mental, como también es hora de contemplar las limitaciones en ciertas personas como posibles ventajas competitivas para un puesto laboral específico.
Algo con lo que coindice Segovia de Reinventa. "Considerando que vivimos una cultura mundial de lo desechable, de lo cual el ámbito laboral no se escapa, una de las formas de revertir la situación pasa por establecer como sociedad nuevos paradigmas que promuevan valores ausentes en la actualidad. Un ejemplo que todos conocemos, es el valor que otorgan las culturas milenarias como la japonesa a la sabiduría y la voz de la experiencia de las personas de edades más avanzadas", dice.
Otra alternativa más específica, a juicio de la experta, podría ser que los programas estatales de reinserción laboral realicen estudios de desempeño en mayores de 45 años, de tal manera que puedan demostrar o asegurar que éste puede mantenerse en niveles esperados y promover así la ampliación del rango etáreo en los perfiles de selección de personal.
Respecto de lo que debieran hacer las personas mayores de 45 años, para volver a ser atractivas profesionalmente, Segovia explica que "un factor importante, tiene que ver con la formación continua, la capacidad de estar en permanente actualización de conocimientos y su constante adaptación a las condiciones del mercado. En especial, respecto de lo que involucra tecnología de información que es donde el cambio se da más exponencial. En éste sentido, añade, una de las vías de reinserción implica incorporar a sus modalidades de búsqueda de trabajo, las redes sociales en Internet.
"Volver a estudiar es una buena forma de demostrar que no se pertenece al grupo de profesionales que resisten el cambio", dice Marull. Porque más allá de los conocimientos técnicos que se puedan adquirir, las personas de más edad que se capacitan, se muestran dispuestas a enriquecer su mirada, reciclarse y dejar en claro que no temen volver a empezar.