A través de estudio Women Fast Forward se buscan medidas para promover la inclusión de las mujeres en el entorno corporativo de forma rápida y eficaz.
El Foro Económico Mundial estima que las tendencias actuales se mantienen, por lo que la equidad entre hombres y mujeres en el ambiente laboral será alcanzada en 2095. Con el objetivo de proponer formas de acelerar este proceso, Ernst & Young (EY) elaboró el Women Fast Forward, un estudio que trata de encontrar las mejores medidas para promover la inclusión de las mujeres en el entorno corporativo de forma rápida y eficaz.
Todavía existen varios lugares alrededor del mundo donde las mujeres no tienen el derecho a votar, ir a la escuela, trabajar y ocupar posiciones de liderazgo en la sociedad. Para el EY, acelerar el avance femenino no es sólo una cuestión de igualdad sino que un imperativo económico. Estudios comprueban que más igualdad implica mayor crecimiento del PIB, más productividad y mejor desempeño para las empresas.
A través de entrevistas con líderes de 400 empresas de todo el mundo, el levantamiento de la EY encontró que los hombres y las mujeres creen que un mayor liderazgo femenino fortalece a las empresas. Alrededor del 35% de las mujeres encuestadas creen que las oportunidades de crecimiento son uno de los factores que ayudan en la aceleración de la inclusión de la mujer en el lugar de trabajo.
En el caso de los hombres, el 27% dice que una cultura organizacional que apoya es la mejor manera de acelerar este proceso. Tanto hombres como mujeres están de acuerdo en que es durante la fase intermedia de su carrera que las mujeres encuentran los mayores obstáculos para el progreso. En general, es entonces cuando deciden dedicarse más a la familia y, a menudo, se ven obligados a abandonar la carrera.
Cuando se les preguntó acerca de cómo los hombres pueden ayudar a las mujeres a avanzar en sus carreras, el 29% de las mujeres dijeron que es mediante la creación de un camino más claro para la promoción de los empleados, mientras que el 25% de los hombres comentaron que la mejor manera es creando horarios de trabajo flexibles. Además, tanto los hombres como las mujeres están de acuerdo en que a través de medidas proactivas de gestión de carreras a las mujeres conseguirán promover una mayor igualdad de género en el lugar de trabajo. Según el estudio, el 64% de las empresas de alto rendimiento creen que hombres y mujeres tienen la misma influencia en la estrategia dentro de sus organizaciones.
Entre las compañías analizadas, las que presentan mejores resultados económicos son aquellas que están haciendo más cosas para impulsar la presencia femenina, con carga horaria flexible y programas de liderazgo para este público.
"Los beneficios económicos asociados a la presencia de las mujeres en posiciones de liderazgo están llevando a las empresas a acelerar el proceso de igualdad de género", dice Tatiana Puente, socio de EY.
La satletas olímpicas Sandra Pires, Jackie Silva y Fabiola Molina asistieron al lanzamiento del estudio y analizaron la presencia de las mujeres en el mundo empresarial. "La búsqueda de la excelencia que tenemos en el deporte hace una gran diferencia cuando traemos al mundo corporativo", dijo Fabiola Molina. "Es mucho más fácil jugar voleibol a ser empresario", agrega Jackie Silva.
"Creo que en los negocios tenemos que ser un apasionado de lo que hacemos, como en el deporte, y la mujer tiene mucha pasión por todo lo que se dedica", dice Sandra Pires