DIJIMOS: Rio de Janeiro vive una revolución urbana de la mano de la industria petrolera y los juegos olímpicos. ¿Podrá evitar el karma del despilfarro y la burbuja inmobiliaria? (“Ciudad maravilla”, AméricaEconomía Nº 406)
LO NUEVO: La justicia de Rio de Janeiro suspendió la licitación de la construcción del Parque Olímpico. El motivo es el desalojo de Vila Autódromo, una favela de 1.000 habitantes. El tribunal cuesitonó la legalidad del proceso. El terreno es de titularidad pública y fue cedido a las familias en un régimen de concesión por 99 años, en 1993.