Es el precio mínimo del barril de petróleo que Venezuela necesita para evitar caer en default y el colapso de su economía. En realidad ese el piso de la banda entre US$50 y US$65 que bancos como Nomura y Barclays estiman como el necesario. Sucede que la caída, que nadie pudo anticipar, del precio del crudo hará que los ingresos de ese origen estén alrededor de los US$22.000 millones en 2016. En febrero el gobierno de Nicolás Maduro debió pagar una deuda de US$1.500 millones y en octubre-noviembre enfrentará vencimientos de US$4.100 millones más US$1.000 millones en intereses. Y un informe de Bank of America asevera que Venezuela debe honrar, además, otros US$6.200 millones de créditos otorgados por China y unos US$4.300 millones en importaciones de crudo.
Con una recesión que se pronostica llevará a la economía a 10% de contracción este año y una inflación esperada de 150%, Venezuela enfrenta también tal escasez de alimentos y otros productos básicos, que se teme que haya que declarar una emergencia humanitaria.