La petrolera estatal colombiana está lista para desplegar su plan de descarbonización y apunta a las energías renovables para hacer sostenible el negocio de oil & gas.
La COP28 ya empezó y el anfitrión este año es nada menos que Emiratos Árabes Unidos, el séptimo productor mundial de petróleo. La elección de la sede de esta edición de la Conferencia de las Partes ha suscitado suspicacias, considerando que los combustibles fósiles representan cerca del 90% de las emisiones de dióxido de carbono que provocan el cambio climático. Y es que tener al frente de las conversaciones sobre el clima a productores de petróleo y gas han despertado voces que apuntan a un claro conflicto de interés.
Sea como fuere, lo cierto es que la industria del petróleo está bajo la lupa desde hace bastante tiempo, en un planeta donde las potencias mundiales hablan de una necesaria transición energética. En ese sentido, las petroleras cargan sobre sus espaldas un gran presión que las pone bajo escrutinio y en un entorno dónde tener un plan de transición es clave.
Ecopetrol, la petrolera estatal colombiana, no es ajena a este requerimiento. Por ello, junto a pesos pesados de la industria petrolera -en total son 50 de las empresas petroleras más grandes del mundo- como ExxonMobil, Saudi Aramco, Abu Dhabi National Oil Company (Adnoc) y Shell, anunciaron en Dubai su propia “Carta para la descarbonización de petróleo y gas” (OGDC, por sus siglas en inglés”), en paralelo al lanzamiento del Compromiso Global de Metano, que busca reducir las emisiones un 30% para 2030.
La meta del documento suscrito por las petroleras es mucho más ambiciosa ya que estas se comprometen a reducir las emisiones de metano de los pozos de petróleo y gas en un 80% para 2030.
El compromiso de Ecopetrol con el medio ambiente y la sostenibilidad del negocio no ha nacido con este reciente compromiso de descarbonización de la industria de oil & gas. Ya en febrero de 2020, la empresa más grande de Colombia lanzó Estrategia 2040, su plan a largo plazo que incluye diferentes metas operativas y financieras orientadas a la transición energética y la diversificación de su portafolio.
Los esfuerzos de Ecopetrol en este campo van teniendo visibilidad a nivel internacional. Según el informe “Apuestas más riesgosas, bolsillos más pequeños: cómo están gastando las compañías petroleras nacionales dinero público en medio de la transición energética”, elaborado por el Natural Resource Governance Institute (NRGI), Ecopetrol, junto a su par brasileña Petrobras, obtuvieron un puntaje de 8 sobre 10 por su preparación para gestionar los riesgos de la transición energética. El informe evalúa 21 petroleras nacionales, incluyendo a Ecopetrol, Petrobras y otras tres latinoamericanas: YPF (con un puntaje de 5), Pemex (con tres puntos) y la venezolana PDVSA, con cero puntos.
“Petrobras y Ecopetrol han reconocido públicamente los riesgos que la transición global supone para sus finanzas, y han divulgado análisis de evaluación de riesgos y mencionados planes de mitigación de riesgos (...) Pertamina (Indonesia), Petrobras y Ecopetrol son raras excepciones”, destaca el NRGI.
Este año, la compañía hizo ajustes a su plan de sostenibilidad con miras a incrementar su valor en la Bolsa de Nueva York.
“El 11 de septiembre del 2023, con ocasión de la celebración de los 15 años de Ecopetrol en la bolsa de valores de Nueva York, la empresa anunció que la Estrategia 2040 ‘Energía que Transforma’ se mantiene preservando el valor del negocio de hidrocarburos y acelerando los nuevos negocios de soluciones de bajas emisiones. Anunciamos algunos cambios con este propósito: ajuste en la palanca estratégica del Caribe Offshore para orientarla hacia la maximización del potencial del gas en el Caribe colombiano costa afuera; no se contempla el desarrollo en Colombia de la actividad de hidrocarburos en yacimientos no convencionales y se reemplaza el objetivo estratégico de eficiencia energética por la optimización del consumo interno de energía en 25 petajulios (PJ, unidad de energía equivalente a mil billones de julios ) acumulado al período 2018-2030. Los demás componentes de la estrategia anunciada al mercado en febrero de 2022 no tienen variación”, dice a AméricaEconomía Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol. “Nuestra apuesta no se trata de sustituir energéticos, se orienta más a la adición de nuevos energéticos, entre ellos las energías renovables”.
Actualmente, Ecopetrol cuenta con 208 MW de energía renovable en operación y soportados con contratos de compra. A corto plazo, la meta es llegar a 900 MW a 2025 y a 1.000 MW a 2030. A la fecha, la compañía tiene varios proyectos en construcción, entre los que se encuentran Campo La Cira (56 MW) y Refinería de Cartagena (23 MW). El portafolio de oportunidades a largo plazo (2030 – 2040) es amplio y contempla un potencial de más de 1.500 MW en desarrollos solares, más de 250 MW en eólicos, más de 400 MW a partir de biomasa, cerca de que 150 MW en biogás, entre otros.
EL GAS NATURAL COMO HABILITADOR
El gas natural será el protagonista de esta ansiada transición energética, impulsada y demandada por el presidente de Colombia Gustavo Petro. “El gas natural es el energético fundamental para la transición energética, motor de desarrollo energético y social. Su rol está asociado a abastecer el mercado del país, gas social, generación de energía, producción de hidrógeno y el recobro”, dice el CEO de Ecopetrol.
En noviembre pasado, la empresa informó que viene evaluando una oferta de su homóloga venezolana PDVSA para importar gas natural a partir de diciembre de 2024. Esto, después de que Gustavo Petro anunciara en una visita a Caracas que “es muy probable” que Ecopetrol se convierta en socio de PDVSA en la explotación de gas y petróleo.
En cuanto al hidrógeno, como otra alternativa de fuente energética renovable, Roa afirma que la petrolera estatal es el mayor productor del país con una producción de 130 kTon/año, donde el 90% es gris y el 10% restante es azul. “En línea con nuestro plan estratégico de hidrógeno de bajo carbono tenemos la meta a 2040 de producir un millón de toneladas, de las cuales 60% serán de hidrógeno verde, 30% hidrógeno azul y 30% hidrógeno blanco”, refiere Roa.
En noviembre pasado, el ministro de Hacienda de Colombia, Ricardo Bonilla, explicaba de esta forma el futuro de Ecopetrol: “no quiere decir que abandone la exploración y explotación de petróleo, sino que simplemente coloque recursos para ir más allá y autoricemos las inversiones para que haga pilotos en hidrógeno”.
De esta forma, la orientación de la compañía ya no será exclusivamente a hidrocarburos, sino en la energía solar, eólica y de hidrógeno, lo cual hace sentido, tomando en cuenta que en 2021 se convirtió en la mayor accionista de Interconexión Eléctrica (ISA), con presencia en varios países de América Latina, tras adquirir la participación del Ministerio de Hacienda y Crédito Público (51,4%).
“Nuestro objetivo es mantener inversiones entre 20 billones COP (más de US$ 5.255 millones) y 30 billones COP (cerca de US$ 7.880 millones) en los años venideros. En nuestro negocio de hidrocarburos, como fuente principal para asegurar la transición energética, esperamos invertir un 69% de ese valor y gradualmente llegar a un 65% para 2030. Para nuestro negocio de transmisión vías y telecomunicaciones destinaremos un 19% hasta llegar a un 15% en 2030. En lo referente con nuestros negocios de bajas emisiones, destinaremos un 12% de la inversión y la incrementaremos hasta un 20% en 2030”, concluye Ricardo Roa.
