Reporte “China CEO Outlook” estima que la recuperación y el crecimiento constante de las inversiones de mayor calidad dentro y fuera de ese país.

Con la ratificación en el poder del presidente de China, Xi Jinping, la implementación de una “nueva visión de desarrollo”, el surgimiento de un renovado ciclo económico, y  la implementación de un "nuevo paradigma de la globalización" que está siendo promovido por el Gobierno chino, sustentarán y determinarán la trayectoria y las características de la inversión extranjera directa interna y externa del país en 2018 y el futuro.

Esa es una de las principales conclusiones del informe “China CEO Outlook”, elaborado por KPMG, el cual además, estima que la recuperación y el crecimiento constante de las inversiones de mayor calidad dentro y fuera de ese país, “contribuirán a la transformación y modernización en curso de la economía china, así como a la vitalidad y resistencia del comercio y las corrientes de inversión mundiales”.

El estudio agrega que tanto la inversión china en el exterior como la demanda de ese país, desempeñarán “un papel clave” en la recuperación económica mundial y en el desarrollo de un nuevo modelo de globalización más "inclusivo", y constituirán fuerzas importantes que apoyarán la prosperidad económica mundial.

De acuerdo al sondeo, las reformas anunciadas por el gobierno chino para impulsar la inversión en el extranjero como el mejoramiento de la supervisión y regulación de la conducta del mercado; el perfeccionamiento de la gestión de los flujos de inversión transfronterizos y profundizar en las reformas del sistema financiero, “fomentarán el flujo bidireccional y la conectividad del capital”.

No obstante, el documento advierte que se necesitarán “ciertos cambios de mentalidad y de conducta” por parte de los inversionistas a la hora de pensar en cómo beneficiarse de los factores impulsores y de las tendencias que subyacen a la aparición del "nuevo ciclo económico" y del "nuevo paradigma de la globalización".

Una característica común que tendrá este “nuevo ciclo económico”, será la asociación entre empresas chinas e internacionales. “Esto ayudará a las empresas a localizar sus inversiones y a crear confianza con las partes interesadas locales e internacionales; complementará sus respectivas ventajas comparativas para desarrollar conjuntamente mercados de terceros países; y localizará más oportunidades de inversión a lo largo de la iniciativa del "Cinturón y la Ruta de la Seda”, enfatiza el informe.

Desde KPMG, enfatizaron que “al realizar más inversiones de alta calidad en China y en los mercados extranjeros, estas empresas contribuirán a dar forma al surgimiento de un nuevo período de desarrollo económico en China y a la prosperidad de la inversión y el comercio mundiales”.