Ambas naciones firmaron el martes en Beijing un comunicado conjunto sobre el establecimiento de las relaciones diplomáticas.
Como una gran oportunidad de desarrollo ven salvadoreños el establecimiento de las relaciones diplomáticas entre El Salvador y China.
Pobladores de la ciudad de San Salvador mostraron su optimismo e interés sobre el futuro de este nuevo vínculo, anunciado por el presidente salvadoreño, Salvador Sánchez, la noche del lunes.
Diego Rodríguez, estudiante universitario de 19 años, ve la relación con China como una gran oportunidad para que su país pueda crecer en lo económico.
"Es una gran oportunidad para que el país pueda atraer más inversión, y por qué no, asociarse con todos los países para hacerlo cada día mejor", dijo Rodríguez.
China y El Salvador firmaron el martes en Beijing un comunicado conjunto sobre el establecimiento de las relaciones diplomáticas.
El comunicado fue firmado por el consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, y el ministro de Relaciones Exteriores salvadoreño, Carlos Castaneda.
"La República Popular China y la República de El Salvador, en concordancia con los intereses y el deseo de los dos pueblos, han decidido reconocerse el uno al otro y establecer relaciones diplomáticas a nivel de embajador, efectivas desde la fecha de la firma de este comunicado", señaló el documento.
Raúl Antonio Díaz, maestro de obras en construcción de 66 años, dio su respaldo a la decisión del gobierno del presidente Sánchez de iniciar este proceso de amistad con China, pues consideró que puede ampliarse el comercio que ya existe entre los dos países.
De manera similar piensa Karina García, vendedora de 25 años, para quién la nueva relación con el país asiático puede ampliar la variedad de productos disponibles para su actividad.
"Puede ampliarse mucho el comercio, hay bastantes cosas chinas que se pueden traer directamente", señaló.
"China puede ayudar a El Salvador para que haya muchos beneficios para todos por medio del comercio y que las mercancías sean más cómodas", agregó García.
Para la estudiante Tatiana Merino, de 19 años, China puede convertirse en una guía para que El Salvador también perfile su desarrollo económico y social.
"China puede ayudarnos a evolucionar como sociedad", expresó la estudiante salvadoreña.
Isabel Gutiérrez, una comerciante de accesorios para celulares que trabaja en los alrededores de la Catedral de San Salvador, dijo que la nueva relación puede ser una puerta de oportunidades para todos.
"Espero que esto pueda mejorar y se abran más fuentes de trabajo, que vengan empresas chinas con buen producto para generar más trabajo, porque hay muchos jóvenes (salvadoreños), incluso profesionales, que no tienen empleo", dijo la comerciante de 51 años.
