Aprender a leer a temprana edad es una de las características reconocidas por la ciencia que recogió el diario inglés The Independent.
Tal como dijo Shakespeare una vez, las personas inteligentes suelen subestimar su inteligencia, mientras que aquellos que no lo son tanto, suelen sobrestimar sus aptitudes.
Este fenómeno ha sido estudiado en profundidad por la psicología, que descubrió que se trata de un sesgo cognitivo al que califica como efecto Dunning-Kruger, en honor a sus descubridores, los investigadores de la Universidad de Cornell, Justin Kruger y David Dunning.
Tras realizar varios experimentos, donde pusieron a prueba a personas con diferentes coeficientes intelectuales, llegaron a la conclusión que “la sobrevaloración del incompetente nace de la mala interpretación de la capacidad de uno mismo”. En tanto, “la infravaloración del competente nace de la mala interpretación de la capacidad de los demás”.
Esta última afirmación resulta muy interesante, pues es un tema que poco se discute. Una persona inteligente, tiende a creer que el resto es igual de hábil y que tiene una capacidad de razonamiento y conocimiento similar, por lo cual asume que se encuentra dentro del promedio, sin darse cuenta que en realidad sus habilidades son claramente superiores.
Es justamente para esta población que el diario inglés The Independent creó un listado con algunos de los rasgos que, según la ciencia, suelen estar presentes en las personas más inteligentes.
Aprendiste a leer a temprana edad
En 2012, un estudio realizado por la Universidad de Edimburgo y el King College de Londres (Reino Unido) puso a prueba a dos mil gemelos idénticos y descubrieron que aquellos que aprendieron a leer antes, tendían a tener mejores resultados en test de habilidad cognitiva.
Los autores del estudio sugirieron que la lectura a edad temprana, incrementa la habilidad verbal (como aprendizaje del vocabulario) y no verbal (destreza de razonamiento).
“La rápida solución de las dificultades en la lectura podría ayudar no solo al crecimiento de la alfabetización, sino también a las habilidades cognitivas más generales, de gran importancia durante toda la vida”, comentó Stuart J. Ritchie, líder del estudio.
Te preocupas demasiado
La ansiedad es un problema complejo para muchas personas, sin embargo, también es signo de inteligencia, así lo aseguran varias estudios al respecto.
Una investigación realizada en la Universidad de Haifa, en Israel, determinó que las personas que padecen ansiedad serían más inteligentes que el promedio, pues gracias a su capacidad de sentir las emociones de manera tangible, siempre están mejor preparados para resolver problemas y detectar el peligro.
En tanto otro estudio de SUNY Downstate Medical Center en New York, afirma que las personas con ansiedad están constantemente examinando y procesando información, así como evaluando cada situación. Gracias a ello son más analíticos por lo que pueden conseguir mejores resultados en una prueba de coeficiencia intelectual.
Eres curioso
Tener una gran curiosidad por diversos temas, también es una señal de inteligencia según la ciencia. Un estudio publicado por la revista Neuron afirma que ésta resulta beneficiosa para el aprendizaje, pues las personas suelen retener más información cuando se trata de cuestiones que despiertan su interés
Esto pues entran en un estado de motivación intrínseco que aumenta la actividad en las áreas del cerebro que están relacionadas con el aprendizaje, la memoria y las conductas placenteras.
Según el investigador Matthias Gruber, de la Universidad de California, cuando sentimos curiosidad memorizamos sus elementos con mayor facilidad, por lo que mientras mayor sea la capacidad de interés, mayor será el conocimiento.
Eres desordenado
Aunque desde niños nos enseñaron a que debemos mantener en orden las cosas, varios estudios aseguraron que las personas desordenadas suelen ser más inteligentes.
Tres experimentos publicados en la revista Psychological Science y realizados por investigadores de la Universidad de Missouri, determinaron que quienes trabajan en ambientes menos organizados suelen ser más creativos, por ende tienden a romper con lo tradicional y producen conocimientos nuevos. Por su parte, quienes se desempeñan en un lugar pulcro, suelen quedarse en su zona de confort.
Por otra parte, las personas desordenadas suelen ser más espontáneas, no tienen temor a cometer errores y además no dejan que los detalles las detengan.
Eres sarcástico
El humor ácido o los comentarios sarcásticos también son señales de inteligencia, según un estudio realizado por investigadores de las universidades de Columbia y Harvard y la Escuela de Negocios INSEAD.
Según la investigación, el sarcasmo incrementa la actividad cerebral de ambos participantes, el locutor y el interlocutor.
Esto, pues el sarcasmo hace que las personas utilicen el pensamiento abstracto para poder codificar el significado oculto detrás de las palabras, lo que permite crear nuevas conexiones creativas en el cerebro.
Dentro de los participantes del estudio, quienes utilizaban y comprendían este tipo de lenguaje tenían tres veces mejores resultados en pruebas de inteligencia que quienes optaron por conversaciones sinceras.
Tienes sentido del humor
El humor es subjetivo, pero también requiere mucha creatividad e inteligencia para poder lograr hacer reír a la gente. Un estudio de la University of New Mexico encontró una conexión directa entre un buen sentido del humor y un nivel de inteligencia más alto.
Algunos ejemplos de esto son los comediantes Lewis Black y Bill Maher, quienes tienen pre-grados en historia y literatura en prestigiosas universidades estadounidenses, y que han dejado su marca en el mundo de la comedia.
La razón es que el humor, y la habilidad de hacer bromas rápidas, puede indicar que tu mente puede rápidamente relacionar conceptos verbales, y mezclarlos en una actividad creativa que necesita mucha más concentración y estudio de lo que se piensa normalmente.