Hay quienes creen que un buen doctor debe dar un diagnóstico correcto prácticamente de inmediato, sin saber que además de los exámenes y estudios, los síntomas y la historia médica, juegan también un papel importante en el proceso de diagnosticar la enfermedad y el tratamiento para lidiar con la misma.

 

Mientras el paciente comparte su historia médica y sus síntomas, el médico va desarrollando una lista de posibles condiciones que puedan estar causando el problema, para entonces, con los resultados de los exámenes, determinar la causa definitiva.

 

Este proceso funciona así en un 85% de los casos, según lo confirma la página web especializada en medicina, Kevinmd, asegurando que la información compartida por los pacientes es la clave para llegar al diagnóstico correcto.

 

Por eso compartimos a continuación una lista de consejos que te ayudarán a compartir la información correcta y necesaria con el médico:

 

- Prepárate para compartir información, no esperes a llegar al consultorio para comenzar a pensar en los síntomas que has sentido y las preguntas que desees hacer. Desde un tiempo antes de la consulta es recomendable anotar todos los puntos de conversación para que ninguno quede por fuera. También es importante recordar decirlo todo, sin dejar información por fuera por pensar que es irrelevante.

 

- Presta atención a tu cuerpo, si te sientes mal o algo te causa molestia es mejor no esperar para hacer una visita médica. Para obtener mejores resultados es mejor enfocarse en los detalles de los síntomas como la duración, locación y el tipo de dolor que se experimenta.

 

- Haz una cita. Muchas personas toman la comodidad de hacer una simple llamada al doctor por pereza de asistir, lo cual puede ser una de las mayores causas de los diagnósticos erróneos.

 

- Pregunta, ya que es importante que sacies cualquier curiosidad y estés al tanto de todo lo que implique la condición que padezcas y qué puedes hacer para mejorarla.

 

- Siguientes pasos. Es importante estar enterado de qué síntomas deberías sentir en el futuro y cómo responder ante cualquier eventualidad.

 

- Sé tu propio abogado. Asegúrate de que el doctor esta escuchando y tomando en cuenta todo lo que tienes que decir.

María Andreína Bariona/ Diario Las Américas