Ser un líder no significa ser una persona inaccesible y prepotente.
Además de inteligentes, los grandes líderes hacen que las personas se sientan queridos. Se trata de personas inspiradoras y visionarias. Por lo mismo, en Business Insider refieren sobre tres puntos: se les conoce por su nombre, exigen excelencia y quieren lo mejor para quienes los rodean.
Los líderesa saben que para obtener los mejores resultados de su equipo, deben invertir en una relación. Y esto no se logra gritando más fuerte ni siendo menos accesible. Se trata de cosas simples, el respeto.
Este respeto también tiene relación con exigir al equipo. Porque ellos entienden que son apreciados cuando tienen el desafío de hacer algo mejor de lo que se ha hecho en el pasado. Los grandes líderes exigen más porque quieren lo mejor de los que les rodean.
No se trata sólo de beneficios empresariales. Todo esto ayuda a otros a convertirse en una mejor versión de sí mismos. Es la forma más verdadera del amor.