Hay un momento en el que simplemente ya no quieres perder el tiempo. Quizás ya lo has perdido con alguno de los que aparecen en esta lista, pero por si las dudas, presta atención a los hombres con los que nunca debes salir si te quieres ahorrar decepciones amorosas:

 

 

Quiere saber dónde estás, con quién vas, y a qué. Se molesta si quieres hacer planes sin él y emite opiniones sobre la ropa que usas y la gente con la que te juntas. Seguro lo encontrarás husmeando en tus cosas personales, tu celular o tus cuentas de redes sociales. Ésta, además, es una forma de ejercer violencia, nadie tiene derecho a revisar tus cosas o decirte de quién puedes ser amiga o no. Aléjate inmediatamente.

 

 

Si le cuentas que tuviste un mal día, él tuvo un día peor. Si conseguiste una entrevista de trabajo, él está por conseguir el mejor puesto del mundo. Si dices que odias el chocolate amargo, él odia el chocolate amargo y el blanco y el chocolate con leche y seis variedades más. Él siempre sabe más que tú y ha vivido cosas más increíbles que tú, al menos en su mente. Toda la conversación y la relación gira en torno a él ¿Hace falta decir algo más?

 

 

Te hace creer que su vida es una continua sucesión de “malas rachas en la chamba”, pero la verdad es que no quiere trabajar o hay algo terriblemente mal con su actitud que hace que siempre lo despidan. Está muy bien que exista reciprocidad en una relación de pareja y que se apoyen en los momentos difíciles, incluso en los relacionados a la economía, pero no que se permitan ser unos vividores. En esta época de liberación femenina, lo único que podemos exigirles es que al menos paguen el papel con el que se limpian.

 

 

 

Que tengan una buena relación con su familia habla bien de ellos, pero que tengan mamitis, no. Habla unas 100 veces al día con su mamá, siempre te compara con ella, le pide su opinión para todo y eso significa que su madre esté al tanto de lo que sucede entre ustedes y que opine. Él espera de ti lo mismo que de su madre. Ya te enfrentarás a la maternidad cuando lo decidas, evita comenzar desde el noviazgo.

 

 

Las personas no son objetos y no nos pertenecen, pero no quieres salir con el tipo que le endulza el oído a todas las que puede. Ese hombre no quiere establecer una relación contigo por ser tú, lo hace como quien ocupa una vacante de empleada de mostrador, podrías ser tú o podría ser cualquiera. No va a durar, no importa cuántas ganas le eches.

 

 

Seguro se la pasan increíble y tienen muchas cosas en común, todas tus amigas saben que están juntos y sus amigos también, quizás hasta tu familia lo conoce. Pero no importa cuánto tiempo lleven juntos nomás no se vuelve oficial… ni se volverá. No pierdas tu tiempo, Hollywood te habrá hecho creer que las cosas pueden cambiar y que cuando vea que te ha perdido se arrastrará a tus pies pidiéndote que, ahora sí, anden. Pero no, este tipo de hombres son cobardes y ya, no tienen agallas para decirte que no eres la mujer con la que quieren estar, que se la pasan bien, pero eso no significa que quieran tomarte en serio algún día. Afrontémoslo, si para ellos el título no es importante y para ti lo es, ¿no tiene más sentido que él ceda?

 

 

A este ejemplar sólo le interesa tu físico, si eres inteligente, divertida, culta, curiosa, detallista o buena persona es irrelevante. Si estás pensando en que sea tu compañero para toda la vida (o por un largo rato), sólo te recordamos que la juventud es pasajera, todo por servir se acaba y la ley de gravedad hace que todo se caiga tarde o temprano. ¿Qué pasará cuando no estés a la altura de sus estándares?

 

¿Alguno te pareció conocido?, ¿cuáles agregarías a la lista?

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