Los tripulantes de cabina comenzaron este domingo una segunda paralización, después que en las negociaciones entre Unite y la aerolínea no se logró llegar a un acuerdo.
Londres. British Airways podría sufrir más interrupciones por huelgas este verano boreal a menos de que resuelva una disputa con los tripulantes de cabina sobre los beneficios por viajes, dijo este lunes uno de los líderes del mayor sindicato de Reino Unido, Unite.
Los tripulantes de cabina comenzaron este domingo una segunda huelga de cinco días, antes de una semana de vacaciones escolares, después de que en las negociaciones entre Unite y la aerolínea no consiguieran llegar a un acuerdo la semana pasada.
Ambas partes en la disputa han asegurado que podrían estar cerca de un acuerdo sobre pagos y los recortes de plantilla y de beneficios a los viajes, pero se culpan los unos a los otros de la falta de progresos.
Unite ha ofrecido suspender las huelgas si la aerolínea restablece los beneficios retirados por viajes.
Está prevista una tercera ronda de huelgas el 5 de junio, una semana antes del comienzo del Mundial de fútbol en Sudáfrica.
Tony Woodley, secretario general conjunto de Unite, dijo a los delegados este lunes que dentro de una semana podría votarse si llevar a cabo más acciones.
"Sólo hay una cosa que hacer con el acoso, que es enfrentarse a ellos hasta que aprendan maneras", dijo Woodley, según extractos de su discurso difundido por el sindicato.
Woodley se dirigió directamente al consejero delegado de BA en su discurso.
"Todos sabemos que hay un acuerdo al que llegar en British Airways, uno que reconozca las auténticas necesidades comerciales y problemas de su compañía, así como los intereses legítimos de nuestros miembros. Unite está listo para llegar a ese acuerdo", dijo.
"Pero no estamos y nunca estaremos preparados para ver a nuestros miembros y a nuestro sindicato humillados, castigados y reducidos a la ruina", puntualizó.
La huelga ha ocurrido en unos momentos difíciles para la aerolínea, a la que los paros de siete días le costaron en marzo unos 43 millones de libras.
La aerolínea informó la semana pasada de un segundo año de pérdidas récord en plena lucha contra la crisis económica global y la recesión en toda la industria.