Si bien la inflación está muy por debajo del objetivo del Banco Central y la mayoría del mercado espera que siga así el próximo año, el crecimiento ha repuntado, lo que sugiere que la economía está comenzando a responder al estímulo monetario y las reformas económicas del gobierno.
Brasilia.- El Banco Central de Brasil rebajaría su tasa de interés a un nuevo mínimo de 4,50% el miércoles, según la opinión unánime de economistas consultados en un sondeo de Reuters, pero datos económicos más robustos que lo esperado sugieren que este sería el último recorte del ciclo.
Si bien la inflación está muy por debajo del objetivo del Banco Central y la mayoría del mercado espera que siga así el próximo año, el crecimiento ha repuntado, lo que sugiere que la economía está comenzando a responder al estímulo monetario y las reformas económicas del gobierno.
Los 30 economistas consultados dijeron que el Comité de Política Monetaria (Copom) reducirá su tasa de interés Selic en medio punto porcentual por cuarta reunión consecutiva, tal como lo indicó en octubre.
El panorama, sin embargo, ha cambiado considerablemente. Las expectativas unánimes de tasas más bajas durante los próximos 12 meses vistas en el sondeo previo se han evaporado y quienes dicen que existe un sesgo bajista de la Selic no superan a la mitad de los consultados.
De los 26 que entregaron una opinión, 13 dijeron que el sesgo para las tasas durante el próximo año es a la baja, 10 lo consideraron neutral y tres apuntaron a un alza. En octubre, los 25 economistas consultados dijeron que las tasas serían más bajas dentro de un año.
El Copom anunciará su decisión después de las 2100 GMT del miércoles al cierre de su reunión de dos días.
"No veo al Copom recortando bajo 4,50%", afirmó William Jackson, economista jefe de mercados emergentes en Capital Economics.
"Aunque la economía se está recuperando, no crecerá con la rapidez suficiente como para generar presiones sostenidas de los precios, así que no creo que se pueda justificar un alza en los próximos 12 meses", agregó.
El punto de inflexión pareció estar en los datos del PIB del tercer trimestre la semana pasada, que mostraron que la economía se expandió un 0,6%. Fue más que lo esperado -el mayor ritmo desde inicios de 2018- y llevó a algunos economistas a subir sus proyecciones de crecimiento 2020 sobre la marca de un 2,0%.
La inflación sigue bien contenida, sin señales de que el tipo de cambio del real frente al dólar -en mínimos récord- esté traduciéndose en mayores precios o mayores expectativas inflacionarias.
En un comunicado que acompañó a su recorte de tasas de octubre, el Copom dijo que el panorama benigno para la inflación "debería permitir un ajuste adicional de igual magnitud", lo que a juicio de los economistas prácticamente garantizó una rebaja de tasas esta semana.