La nanotecnología y el desarrollo de la wearable tech permiten pensar ahora en un futuro en el que la medicina no sólo sea invisible, sino que además evite los fastidiosos pinchazos.
Blogthinkbig.com Millones de diabéticos deben sufrir molestos pinchazos a diario para detectar los niveles de glucosa en sangre. La tecnología wearable aplicada en medicina podría hacerles la vida más cómoda.
En 2030, más de 550 millones de personas padecerán diabetes. Esta enfermedad crónica se origina por un mal funcionamiento de nuestro páncreas, por lo que la hormona conocida como insulina no se produce o se fabrica de manera incorrecta (y las células no son sensibles a su acción). Este trastorno provoca que los niveles de glucosa en sangre de los diabéticos aumenten de manera desproporcionada, lo que a su vez induce síntomas variados como visión borrosa, sed excesiva, fatiga, hambre, micción frecuente o pérdida de peso.
Cuando un paciente es diagnosticado con diabetes, ha de someterse a controles estrictos para determinar sus niveles de glucosa en sangre. Uno de estos exámenes consiste en un molesto pinchazo en el dedo, que a menudo ha de realizarse múltiples veces durante el día. La nanotecnología y el desarrollo de la wearable tech permiten pensar ahora en un futuro en el que la medicina no sólo sea invisible, sino que además evite los fastidiosos pinchazos.
El objetivo de estos pinchazos no es otro que determinar los niveles de azúcar en la sangre. Si en un momento dado los diabéticos sufren hiperglucemia, tendrán que administrarse insulina exógena para controlar la glucosa que circula por su sangre. Las molestias ocasionadas por este examen diagnóstico provocan que los pacientes eviten pincharse, poniendo en riesgo su salud.
Necesitamos, por tanto, un test que sea capaz de determinar el nivel de glucosa en sangre de forma rápida, sencilla y especialmente sin provocar estas incomodidades. Nanoingenieros de la University of California (San Diego) pensaron en sustituir los pinchazos por tatuajes temporales que podrían ser colocados sobre la piel.
Estos sistemas flexibles y cómodos podrían detectar el nivel de azúcar a través de los fluidos que circulan por las células de la epidermis.
La idea es que el diagnóstico se realice de manera no invasiva, sin que los diabéticos deban sufrir molestos pinchazos para controlar su salud. Supone la llegada de una nueva medicina, más cómoda y fácil, de la mano de una tecnología wearable casi invisible.
Aunque los investigadores aún no han logrado que estos dispositivos analicen los niveles mínimos de concentración de glucosa para ser usados en medicina, lo cierto es que su idea es una verdadera ‘prueba de concepto’ con importantes aplicaciones.
Podríamos pensar en un futuro en el que se analizarían otros metabolitos a través de simples tatuajes temporales, o incluso en la administración de fármacos mediante estos cómodos sistemas. Además, los científicos trabajan para incorporar la tecnología Bluetooth a estos dispositivos, con el objetivo de que la lectura de los niveles de glucosa se envíe también a nuestro médico de cabecera.
Su trabajo, publicado en la revista Analytical Chemistry abre las puertas de una revolución médica tan sencilla como invisible. De la mano de la nanotecnología y de la wearable tech, millones de diabéticos en el mundo podrían beneficiarse de estos simples dispositivos acoplados a la piel.