La capital había confirmado 463 nuevos casos el viernes, otro récord de un solo día, e imploró a los residentes que siguieran las pautas de salud para contener la propagación del virus.

Tokio podría declarar un estado de emergencia si la situación del coronavirus en la capital japonesa se deteriora aún más, advirtió su gobernador el viernes, mientras se profundiza el debate sobre cómo responder al aumento récord de nuevas infecciones.

Yuriko Koike dijo que Tokio había confirmado 463 nuevos casos el viernes, otro récord de un solo día, e imploró a los residentes que siguieran las pautas de salud para contener la propagación del virus.

"Si la situación empeora, Tokio tendría que pensar en emitir su propio estado de emergencia", dijo Koike en una conferencia de prensa.

"Estamos entrando en el período de vacaciones de verano cuando la gente normalmente hace planes para viajes y eventos, pero desafortunadamente, este verano será diferente de un año normal".

Los comentarios de Koike se hicieron eco de los hechos hace solo tres meses cuando pidió a los residentes que se quedaran en casa durante las vacaciones de la Semana Dorada de finales de abril a principios de mayo, ya que Japón estaba bajo un estado de emergencia a nivel nacional.

El gobierno levantó esa emergencia a fines de mayo después de que Japón parecía haber contenido el brote, promocionando sus hábitos de uso de máscaras y su sistema de salud como algunos de los factores que lo ayudaron a ir mejor que Europa y los Estados Unidos.

Pero el virus ha resurgido de manera preocupante, particularmente en la última semana, justo cuando el gobierno lanzó su controvertida campaña de subsidios Go To Travel para revivir su industria turística nacional.

El número de casos nuevos diarios en Japón alcanzó un nuevo récord el jueves, con infecciones que se propagan rápidamente no solo en Tokio sino también en otras regiones.

A diferencia del gobernador de Tokio, el secretario en jefe del gabinete, Yoshihide Suga, reiteró la postura del gobierno de que Japón no necesitaba volver a imponer un estado de emergencia a nivel nacional.

Dijo que la tendencia actual en infecciones era diferente de la del primer pico en marzo y abril, cuando había una mayor cantidad de casos graves e infecciones entre la población de ancianos de mayor riesgo.

Los menores de 40 años con síntomas leves o sin síntomas han representado hasta tres cuartos de los casos recientes, y los grupos en los bares son responsables de gran parte del aumento.

Los legisladores de la oposición, sin embargo, han acusado al gobierno de enviar mensajes contradictorios y anteponer la economía a la contención del virus con el lanzamiento de la campaña Go To Travel.

"Por supuesto que necesitamos mejorar la economía, pero la gente todavía está preocupada por la propagación del virus", dijo Ryosuke Takeda, legislador del Partido Comunista Japonés.

“La administración ha estado diciendo que se asegurarán de lograr la contención del coronavirus y la recuperación económica, pero el inicio apresurado de la campaña 'Ir a' me dice que (el primer ministro Shinzo) Abe y el (ministro de Economía Yasutoshi) Nishimura eligieron la economía sobre la prevención del virus ".