Aunque el proyecto chocaba contra la pared una y otra vez, el equipo creativo tomó una decisión radical para mejorarlo. Esa dinámica es hoy la marca de fábrica de los estudios Pixar.
No cabe duda de que la saga "Toy Story" marca un antes y un después en la historia del cine animado en el mundo. No sólo por las fronteras temáticas y tecnológicas que ha traspasado en cada una de sus partes, sino que -además- por convertirse en un proyecto exitoso económicamente, cuando nadie ni siquiera lo pensó en el primer momento.
Un ejemplo de ese orgullo es que en Pixar cuando una persona cumple una década trabajando, se le regala una figura del astronauta Buzz Lightyear. Y cuando cumple veinte años, otra del vaquero Woody.
Ambos personajes son la base de todo el universo "Toy Story". Dos juguetes que se disputan el amor de un niño, pero que también se dan cuenta de que la contienda es estéril, por lo que comienzan a potenciar un lazo entre ambos.
Junto a ellos un amplio abanico de juguetes que representan las más diversas ópticas de la naturaleza humana. Eso porque, si bien son juguetes que toman vida cuando las personas no están, actúan como si fueran humanos...
Todo ese mundo cumple veinte años y el lunes 14 de diciembre Disney Channel estrena un especial para conmemorar la importante fecha. Los estudios Pixar y Disney si bien oficializaron su asociación en enero del año 2006, trabajan juntos desde 1991.
El programa televisivo recuerda los mejores momentos de las tres partes que lleva la saga, adelantando algunos detalles de "Toy Story 4", la que -a diferencia de sus predecesoras- apuesta por una historia alejada del proceso que siguen las otras y bajo la clave de comedia romántica narra una historia entre el vaquero Woody y la pastora de ovejas Bo Peep.
El proyecto implicó un punto de inflexión en la joven compañía creada a fines de los 80. Los creativos John Lasseter (director) junto a Josh Cooley, Will McCormack y Rashida Jones (detrás del guión) chocaban contra la pared para sacarlo adelante.
Con la idea de congeniar con los criterios entre Disney y Pixar lo cierto es que el filme avanzaba como un complejo híbrido y la historia se perdía. Cuando la idea ya dejaba de convencer a todos, Lasseter pidió una última muestra de confianza: solicitó unos días más para sacarle brillo al filme.
Convencidos que la cosa no tenía vuelta, los directivos le dijeron que sí. Pero Lesseter y su equipo tomaron el toro por las astas: se encerraron a contar la historia que ellos querían ver en pantalla. Y, bueno, ya se sabe cómo terminó todo.
De allí en adelante, esta última dinámica se transformó en marca de fábrica: las historias que contarían en Pixar serían sólo la que los creativos verían. Así es cómo les ha ido, con éxitos tras éxitos: "Buscando a Nemo", "Los Increibles", "Up" y "Cars", por citar sólo algunas.
La primera "Toys story" implicó el trabajo durante cuatro años de 110 animadores (en lugar de los ocho que se pensaron al comienzo) y el costo total fue de US$30 millones. Sin embargo, una estimación somera ubica que la recaudación mundial del filme supera los US$550 millones.
Cada cuadro de la película supuso entre cuatro y trece horas de dedicación. Hasta la aparición de "Frozen" y su pegadora canción "Let it go" (película de Disney), "Toys 3" era el filme animado más exitoso de la historia. La saga es la única cinta animada que ha sido proyectada en 2D, 3D y fuera de las salas de cine convencional, también en Imax.
El presidente de Walt Disney Parks and Resorts, Bob Chapek, anuncia otra sorpresa al cumplirse veinte años: la creación de “Toy Story Land”, en Disney’s Hollywood Studios (Orlando), con 44 mil 500 metros cuadrados de construcción.
Y aunque la fecha de apertura sigue en suspenso, se trabaja sin descanso para inaugurar algunas de las atracciones que lo integrarán antes de 2018, cuando la saga de la cinta continúe en los cines.