Además de la falta de una rutina para el cuidado de la piel, algunas razones por las que aparecen los puntos negros y las espinillas son la configuración hormonal, el uso de productos de maquillaje equivocados y la exposición a toxinas.

 

1.- Un exfoliante fácil de hacer consiste en mezclar bicarbonato de sodio con jugo de limón hasta obtener una pasta fina. Tras humedecer el cutis, se aplica con movimientos ligeros y circulares durante cuatro minutos. Enfócate en los puntos negros, pero recuerda usar un toque ligero. Si frotas muy fuerte podría dañar su piel.

 

2.- Aunque la manera más efectiva de extraer los puntos negros es mediante un tratamiento profesional, podemos hacer un tratamiento casero con clara de huevo y papel absorbente, que elimina las impurezas más cercanas a la superficie, además de ser un excelente exfoliante.

 

3.- La arcilla betonita, que se consigue en tiendas naturistas, es una interesante opción como mascarilla facial. Para fabricarla, se mezcla una medida (que puede ser una cucharada) con otra igual de agua o vinagre de manzana. Se deja actuar en la cara por entre 15 y 20 minutos, y se retira con la ayuda de un paño húmedo y caliente.

El Heraldo/ Lifestyle