El viceprimer ministro de Turquía declaró también que su país está evaluando acuerdos con Israel, en la más clara señal hasta ahora de que reduciría considerablemente los lazos.
Jerusalén. Turquía anunció que está considerando llevar sus relaciones con Israel al mínimo luego de que nueve de sus ciudadanos fueron muertos en un asalto naval israelí contra un convoy de ayuda humanitaria que viajaba rumbo a Franja de Gaza esta semana.
El viceprimer ministro de Turquía, Bulent Arinc, declaró también que su país está evaluando acuerdos con Israel, en la más clara señal hasta ahora de que reduciría considerablemente sus lazos con el alguna vez cercano aliado.
"Podríamos planear reducir nuestras relaciones con Israel a un mínimo, pero para suponer que todo lo que involucra a otro país se suspende en un instante, para decir que te hemos tachado de nuestra agenda, no es la costumbre de nuestro estado", dijo a la emisora NTV.
Turquía llamó a su embajador en Israel tras el incidente y el presidente Abdullah Gul dijo que las relaciones "nunca volverían a ser lo mismo".
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que el incidente en el que murieron nueve activistas internacionales pro palestinos mientras trataban de romper el boqueo a Gaza era trágico, pero que debería utilizarse como una oportunidad para avanzar en los esfuerzos de paz en Oriente Medio.
Una portavoz de los activistas que iban en otro barco que trata de eludir el bloqueo dijo que continuarían su viaje.
Israel, que se enfrenta a un clamor internacional por su operación naval, ha asegurado que detendrá al MV Rachel Corrie, bautizado con el nombre de una activista que murió bajo una excavadora israelí en Gaza en el 2003.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha ordenado a las fuerzas israelíes que ejerzan "cautela y cortesía" a la hora de tratar el barco, que tiene previsto acercarse a las aguas de Gaza este sábado.
Las autoridades israelíes han defendido a sus fuerzas de seguridad tras el incidente del lunes, que ha llevado al borde de la ruptura a las relaciones de Israel con Turquía, nueve de cuyos ciudadanos murieron a bordo del barco con bandera turca abordado por comandos.
Junto con Egipto, Israel reforzó su bloqueo de Gaza después de que Hamas tomara el control del enclave costero palestino en el 2007.
Israel ha defendido el embargo, diciendo que evita que Hamas introduzca armas para luchar contra Israel. Sin embargo, algunos responsables dijeron el jueves que Netanyahu estaba considerando modificar el bloqueo.
El primer ministro israelí está considerando alguna forma de papel internacional en la aplicación de un embargo de armas, a la vez que permita la entrada de artículos de primera necesidad.
Despliegue policial. Aunque el incidente de esta semana ha llevado a miles de personas a las calles en otros países, la reacción popular en los territorios palestinos ha sido limitada.
Anticipándose a protestas por parte de palestinos el viernes, las fuerzas de seguridad israelíes se desplegaron por Jerusalén, dijo el portavoz Micky Rosenfeld.
Los hombres de menos de 40 años no podrán entrar en la zona cercana a la mezquita de Al Aqsa, un lugar que es habitualmente un punto de confrontación entre palestinos e israelíes.
Estados Unidos, que supervisa conversaciones de paz indirectas entre palestinos e israelíes, ha dicho que el incidente no debe minar las negociaciones.
El enviado estadounidense George Mitchell, que está mediando en las conversaciones, habló el jueves de progresos en los encuentros, que muchos observadores dudan que lleven a grandes avances.
Mitchell se reunió con Netanyahu el viernes. El miércoles mantuvo un encuentro con el presidente palestino, Mahmoud Abbas, que un funcionario palestino dijo estuvo dominado por el incidente del barco y el bloqueo de Gaza.
"Creo que lo que es importante ahora es que superemos el actual estancamiento, que usemos esta tragedia como una oportunidad" para avanzar en el proceso de paz palestino-israelí, afirmó el jueves Obama en una entrevista en el programa de Larry King en la CNN.
Estados Unidos ha sido menos crítico con Israel que otros países amigos, expresando simpatía por sus preocupaciones de seguridad, aunque diciendo también que el pueblo de Gaza debe recibir los suministros que necesita.