Los precios del metal, que se usa en la energía y la construcción, han avanzado un 7,5% desde el mínimo de US$ 6.955 del 15 de julio, pero se han desplomado más de un 30% desde un máximo histórico de marzo.
Un dólar más débil impulsaba los precios del cobre el lunes, pero seguían cerca de mínimos de 20 meses ya que la ralentización del crecimiento económico enturbia las perspectivas de la demanda
El cobre de referencia en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subía un 0,4% a US$ 7.480 la tonelada a las 1107 GMT.
Los precios del metal, que se usa en la energía y la construcción, han avanzado un 7,5% desde el mínimo de US$ 6.955 del 15 de julio, pero se han desplomado más de un 30% desde un máximo histórico de marzo.
Para frenar la inflación, los bancos centrales de todo el mundo han iniciado rápidas alzas de las tasas de interés que probablemente frenen el crecimiento económico.
La demanda también ha sido débil en China, el mayor consumidor, debido a los confinamientos por el COVID-19, aunque el Gobierno ha prometido estímulos para reactivar el crecimiento.
"Probablemente estemos cerca del punto más bajo para la mayoría de los metales", dijo la analista de Capital Economics Caroline Bain. "Sí, las perspectivas de la demanda se han deteriorado, pero no todo es malo en el frente de China", dijo.
Los inversores especulativos son cada vez menos bajistas y han reducido sus posiciones cortas netas en el cobre COMEX a unos 14.500 contratos, frente a los 26.500 de principios de julio.
Alemania está a punto de entrar en recesión y la economía pierde fuelle en Estados Unidos, donde se espera que la Reserva Federal vuelva a subir las tasas de interés esta semana.
En una señal esperanzadora para los metales, China lanzará un fondo de hasta US$ 44.000 millones para ayudar a aliviar la crisis de la deuda en el sector inmobiliario, dijo a Reuters un funcionario del banco estatal.
El mercado mundial del cobre, de unos 25 millones de toneladas anuales, tuvo un exceso de oferta de 43.000 toneladas entre enero y mayo, según el Grupo Internacional de Estudios del Cobre (ICSG).
Pero las existencias de cobre en los almacenes de la bolsa son escasas, con sólo 50.350 toneladas en el sistema de la Bolsa de Futuros de Shanghái (ShFE), cerca del mínimo de 12 años y medio del año pasado, de 27.171 toneladas.
El aluminio en la LME bajaba un 0,9% a US$ 2.452,50 por tonelada, el zinc retrocedía un 0,6% a US$ 2.973,50, el plomo caía un 0,3% a 2.012 dólares y el estaño descendía un 1,4% a S$ 24.600 tonelada. El níquel, sin embargo, subía un 1,3% a US$ 22.405.
Por otra parte, el mercado mundial del cobre pasó a tener un superávit de 5.000 toneladas en mayo, frente al déficit de 23.000 toneladas del mes anterior, según datos del Grupo Internacional de Estudios del Cobre (ICSG).
Antes, el ICSG había informado de un superávit de 3.000 toneladas en abril.
Durante los cinco primeros meses de 2022, los datos del ICSG mostraron un superávit de 43.000 toneladas frente a un déficit de 23.000 toneladas en el mismo periodo de 2021.