Sin prevención, el futuro de México en materia de salud luce con un problema muy, pero muy gordo.
El actual gobierno tiene un doble reto en materia de enfermedades crónicas, como los padecimientos cardiovasculares. Por un lado, atender a la gran cantidad de pacientes a los que cada día aquejan estos males y, por otro, en paralelo y de manera simultánea, apostarle a la prevención de la obesidad porque ésta es la gran causante de todos los grandes males de los mexicanos.
Sin prevención, el futuro de México en materia de salud luce con un problema muy, pero muy gordo.
Por lo pronto, si usted es hombre y tiene más de 55 años tiene un alto riesgo de sufrir una enfermedad cardiaca. Si es mujer tiene un periodo más largo, pues estos males se desatan más a partir de los 65 años. Los padecimientos cardiacos son la principal causa de muerte de los mexicanos. Más de 140 mil mueren cada año por males asociados a este rubro.
Lo grave, explican los cardiólogos, es que esta enfermedad suele no presentarse sola, sino va acompañada de diabetes, problemas hepáticos y hasta renales. Y, adivinó, todos estos males tienen una raíz de origen: la obesidad.
En el marco del Congreso Anual de Cardiología Internacional (CADECI), realizado en Guadalajara, Jalisco, especialistas en la materia coincidieron en que es tiempo de apostarle a la prevención y no sólo a mejorar la calidad de vida y atención de los pacientes con estas enfermedades.
Por ello, cardiólogos de talla internacional como Mikhail N. Kosiborod, investigador del Instituto Cardiaco y Vascular del Hospital St. Luke en Kansas City, y George L. Bakris, profesor de medicina del Centro Médico de la Universidad de Chicago, invitados por el laboratorio AstraZeneca a dar una plática a representantes de los medios de comunicación, coincidieron en que el incremento constante de personas con estas enfermedades se debe a que no se está trabajando en la prevención.
En atención médica para las enfermedades cardiovasculares, México no le pide nada a ningún país de primer mundo. Tiene especialistas, incluso que operan en los grandes hospitales de Estados Unidos, Europa y Canadá. El problema es que la enfermedad cardiaca no se previene, y se atiende tarde, cuando la persona ya presenta insuficiencia cardiaca o tiene un infarto que muchas veces es mortal.
Abatelenguas
Tres puntos.
1. ¡Albricias! El IMSS encontró la solución para abatir el desabasto de ciertas medicinas. Al menos en su registro. Resulta que para frenar las quejas por recetas sin surtir, me cuentan, ahora le avisan con anticipación a los médicos qué medicinas faltan para que no las receten. ¡Toing!
2. Espero que no copien ese estilo en las Fuerzas Armadas, porque (con eso de que ya no se mueven solos, y entran a las compras consolidadas de todo el gobierno, que son buenas si se programan con tiempo) resulta que, me dicen, ya comenzaron a tener faltantes de varias claves médicas en sus hospitales, de tan alto prestigio.
3. Lo que pasó con el FUCAM, la organización civil que atiende a mujeres con cáncer y a la que se le retiraron los recursos públicos del extinto Seguro Popular, también está pasando con otras instituciones de asistencia privada.
Este es caso de las que atienden a personas con cataratas, enfermedad reversible que representa la primera causa de ceguera por enfermedad visual en México. Se estima que hay 350 mil personas con esta afección, cuyo único tratamiento efectivo es la cirugía, pero, por el momento, las instituciones privadas que llevaban a cabo estas cirugías con recursos públicos también las suspendieron.
Bajo el microscopio
Aviso a la comunidad. No me contemplen en su agenda de actividades para este lunes 9 de marzo porque me sumo al #UnDíaSinNosotras. Y no, no voy a tener la más mínima tentación de lavar trastes, por si estaban con el pendiente.
La base de esta columna son los temas de salud. Y en estos momentos el peor mal, la peor enfermedad que aqueja a las mujeres en nuestro país es la violencia de que estamos siendo objeto. #NiUnaMenos