La mitad recortó plan de contratación y 33% redujo perspectiva de inversión.
La desaceleración de la economía y el empeoramiento del clima de negocios tendrá un correlato sobre el mercado de trabajo en Uruguay. Según una encuesta empresarial, la mitad de las firmas uruguayas recortó sus planes de contratación de personal para el futuro próximo e incluso, una de cada cuatro empresas pretende reducir su plantilla de trabajadores. De hecho, el número de firmas que esperan reducir su personal más que duplica el de aquellas que esperan aumentarlo.
De acuerdo a la 11ª edición de la encuesta de expectativas empresariales que realizó en mayo la consultora Deloitte a 298 altos ejecutivas de compañías, 47% de las empresas locales revisó recientemente a la baja –o está considerando revisar– sus planes de contratación de personal. Por el contrario, solo 3% corrigió al alza sus perspectivas de contratación.
Desde octubre del año pasado, la brecha entre los empresarios que pretenden reducir su plantilla de trabajadores y los que pretenden aumentarla, se hizo más amplia. El porcentaje de empresas que espera reducir su nivel de empleo pasó de 18% a 24%, mientras que la proporción de empresarios que piensa aumentarlo, de 10% a 8%.
El relevamiento empresarial va en línea con las estadísticas del mercado laboral, que muestran un lento pero sostenido incremento del desempleo. En marzo de este año, la tasa de desocupación trepó a 7,3% de la población activa, su máximo registro desde julio de 2010.
Menos inversión
En referencia a los planes de inversión de cada empresa, el 33% de los participantes señaló que los ha revisado a la baja, mientras que 4% indicó que los ha aumentado.
La percepción de la actividad de las empresas en relación a lo que sucedía un año atrás, fue corregida a la baja. Los que ven una mejora pasaron de 24% en la encuesta de octubre a 19% en mayo. Mirando hacia adelante, se advierte un pesimismo mayor para los próximos 12 meses: el 30% dijo que la situación de la empresa va a empeorar; 6% más que en el informe pasado. El porcentaje de ejecutivos que creen que la situación mejorará cayó de 27% a 24%.
Una de las disminuciones más altas se da en la producción prevista por las empresas dentro de un año, en la que se observa una disminución de 12% en la proporción de encuestados que prevén un aumento (de 31% a 19%). Por el contrario, el número de empresarios que espera que su producción se mantenga aumentó de 59% a 65%. Lo mismo sucedió con los encuestados más pesimistas. Los ejecutivos que esperan una caída subieron de 10% en octubre a 16% en mayo.
Coyuntura
El 49% de los encuestados señaló que Uruguay está más o menos preparado para transitar un escenario más adverso, el 31% dijo que está bien o muy bien y el 20% opinó que el país está mal o muy mal parado para una crisis.
Por otra parte, hay consenso en la percepción de que la situación económica ha desmejorado en el último año –dos tercios de los encuestados se manifestó en ese sentido–. Este es el mayor porcentaje desde que comenzó la encuesta en 2010. El 33% considera que la situación está igual y apenas 2% ve una mejora.
Las perspectivas de crecimiento del país en el mediano plazo se corrigieron a la baja. "La mayoría de los empresarios visualiza una desaceleración adicional de la economía, aumentando sensiblemente el porcentaje de respuestas que aguarda un crecimiento menor a 2% y reduciéndose la proporción de respuestas que apuntan a una expansión de más de 3%", señala el informe.