Hasta la fecha, sólo existen fármacos que ayudan a controlar algunos síntomas de la enfermedad, pero no la pueden retrasar ni detener.
La activación de la enzima "piruvato deshidrogenasa" (PDH) podría recuperar la función motora que se pierde con la enfermedad de Huntington, concluyeron investigadores de la Universidad de Coimbra (Portugal), que realizaron con éxito una prueba en ratones, informó la casa de altos estudios.
Según Ana Cristina Rego, la investigadora de Coimbra que lideró el estudio, la activación de la enzima permite mejorar la producción de energía en las células y, así, posibilita la recuperación de la función motora atrofiada.
El Huntington es una enfermedad "neurodegenerativa" hereditaria hasta ahora incurable y provoca el desgaste de algunas células nerviosas del cerebro, que conllevan la imposibilidad de caminar, hablar o reconocer a los familiares.
El funcionamiento de la enzima PDH se mejoró a través del bloqueo de la actividad de otro grupo de enzimas, las "histona desacetilasas" (HDAC), que se encargan de la regulación de la expresión genética (proceso por el que se transforma la información codificada por los ácidos nucleicos en las proteínas necesarias para su desarrollo, funcionamiento y reproducción con otros organismos).
Rego explicó que los enfermos de Huntington presentan alteraciones en la transcripción de los genes, "un proceso muy importante para que las células puedan funcionar con normalidad", informó la agencia EFE.
La docente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Coimbra subrayó que "los compuestos usados para activar la enzima PDH también se podrán usar clínicamente para retardar la progresión de la dolencia de Huntington".
El estudio contó con la colaboración del Centro de Medicina Molecular y Terapéutica de la Universidad British Columbia de Vancouver, Canadá.
Los primeros síntomas de la enfermedad aparecen a partir de los 30 ó 40 años con movimientos descontrolados, torpeza o problemas de equilibrio.
Hasta la fecha, sólo existen fármacos que ayudan a controlar algunos síntomas de la enfermedad, pero no la pueden retrasar ni detener.