Por Steve Lucas, Presidente del Grupo Soluciones de Plataforma de SAP.
Entre todas las palabras que pronuncian los médicos frente a sus pacientes, dos de las que más temor causan son “cáncer” y “diabetes”. En el caso concreto de esta última, casi podría garantizar que cada persona que está leyendo esto tiene un familiar o amigo que la padece o que sabe de alguien que la sufre.
Yo me cuento entre ellos: fui diagnosticado con diabetes tipo 1 (la más rara de las formas conocidas), la cual, junto con la de tipo 2, afecta la salud de cerca de 30 millones de estadounidenses. Aunque he padecido esta dolencia inmunológica por cerca de dos décadas, en los últimos cinco años he podido medir automáticamente los niveles de azúcar en mi sangre cada cinco minutos, mejorando radicalmente la manera de lidiar con ella. ¿Cómo? ¡A través de internet de las cosas (Internet of Things)! Llevo en mi cuerpo un sensor que monitorea constantemente los índices de glucemia y me advierte sobre cualquier elevación o descenso abrupto, sirviendo como un instrumento que podría literalmente marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Puedo incluso compartir los datos sobre el azúcar en mi sangre con mi doctor y mis familiares a través del Internet o mediante mi teléfono celular.
Sólo el año pasado recibí más de 5 mil alertas sobre altas y bajas y recopilé más de medio millón de filas de datos acerca de mis niveles de glucemia. Por cierto, tendré que inyectarme alrededor de tres mil dosis de insulina este año para ajustar mi nivel de azúcar sanguínea… ¡Pero el conocimiento es poder y ahora, gracias a esta tecnología, podré mantener bajo control mi diabetes, disfrutando de niveles casi normales!
No dejo de sorprenderme de cómo la tecnología cambia y mejora los tratamientos y la prevención de afecciones, en base al análisis de datos médicos personales y agregados compilados a escala universal. Por eso, hoy quiero decir: "¡Soy parte integral de internet de las cosas!"
Imagínense lo que se lograría si pudiéramos combinar mis lecturas de glucemia con los datos anónimos de los otros 30 millones de individuos que en Estados Unidos padecen de diabetes, luego analizarlos mediante el empleo de sofisticadas tecnologías de análisis y minería de datos (como SAP HANA) y, más adelante, identificar patrones, tendencias y hasta las causas de fondo de las enfermedades, para diseñar tratamientos a la medida de cada paciente. En ese orden de ideas, los profesionales de la salud podrían utilizar esta información, no solo para tratar los síntomas de la afección, sino también para atacar las raíces mismas de la enfermedad. Es inmensamente satisfactorio saber que alguien en las antípodas podría beneficiarse del adecuado uso de mis datos médicos personales y gozar de una vida más prolongada y saludable.
Con esto en mente, deseo compartir otra historia, de un ser verdaderamente inspirador. Mi colega en SAP, Franz Deitering, batalla contra el cáncer desde 2008, cuando los médicos le descubrieron un tumor del tamaño de una nuez en su intestino. Se encuentra bien en estos momentos, pero quiere asegurarse de haber derrotado al cáncer para siempre y de que el mal jamás volverá a asomarse a su vida.
En noviembre pasado, Franz se enteró de un programa patrocinado por SAP, llamado COPE (siglas en inglés para “Programa Corporativo de Oncología para Empleados”) y, aprovechando la oportunidad, luego de consultarlo con su médico personal, el profesor Dirk Jaeger del Centro Nacional de Enfermedades Tumorales de Alemania (NCT), se unió al programa.
El programa COPE, desarrollado en conjunto con la firma MolecularHealth, brinda a los médicos la oportunidad de contemplar mejores alternativas de tratamiento para sus pacientes a partir del análisis de los datos genéticos de cada individuo. Hasta ahora, los tratamientos se habían fundamentado en datos empíricos, por lo cual se habían implementado terapias fijas para los tumores de colon o cáncer de mama que se hallaban en determinada fase de progresión. Este nuevo enfoque es radicalmente diferente.
Como cada instancia del cáncer es única y el tratamiento que podría salvar a un determinado paciente podría no funcionar en otro, es imperioso contar con la mayor precisión y exactitud posibles. Mediante el procesamiento de datos sobre secuenciación genética y apoyándose en el poder otorgado por la plataforma SAP HANA, MolecularHealth puede analizar a gran velocidad las características precisas de cada tumor en particular, abarcando información sobre medicamentos y efectos secundarios. Los médicos utilizan esta inteligencia para desarrollar planes personalizados para pacientes específicos, tomar decisiones más informadas sobre los procedimientos más seguros y tratar a sus pacientes de manera más eficiente y efectiva. Adicionalmente, los pacientes experimentarían una sustancial reducción en los efectos colaterales con conlleva la aplicación de medicamentos agresivos.
Franz recibió los resultados de los análisis realizados dentro del programa COPE a comienzos de la primavera pasada. Para que pudiese participar, su médico había enviado muestras de sangre y tejidos de Franz. Aunque los resultados no han demandado algún cambio en el tratamiento que venía recibiendo, él dice que se siente mejor preparado en caso de que el cáncer llegase a reaparecer.
No obstante, como deseamos más prevenir que curar las enfermedades que aquejan a la humanidad, deberíamos enfocar nuestra atención en la salud preventiva. Para los atletas es vital tener una buena salud que ayude a mantener un alto rendimiento. Cuando Matt Howley, Director de Ciencias del Deporte de la Universidad de Notre Dame, se hizo cargo del equipo masculino de fútbol de la universidad hace unos tres años, fue encomendado con la difícil tarea de mantener a los atletas de esa renombrada institución académica en el tope de sus capacidades.
Gracias a sus esfuerzos y empeño, el equipo tuvo acceso a una nueva tecnología desarrollada por la firma Catapult que monitorea el desempeño atlético de los jugadores. Un pequeño dispositivo de geolocalización (GPS) usado por los futbolistas en los juegos competitivos y las prácticas, posibilita el uso de una tecnología satelital que mide la distancia y velocidad de los desplazamientos de cada jugador, cuántas veces pica en velocidad durante el partido y otros múltiples movimientos. Los datos compilados a la fecha por Howley han transformado el juego del equipo universitario y revitalizado su programa de aptitud física, ayudando a los jugadores a sobresalir en el campo de juego y mantenerse sin lesiones de consideración.
Las actividades deportivas constituyen actualmente un negocio digital. Cinco mega tendencias (híper-conectividad, súper-computación, computación en la nube, dispositivos miniaturizados y cíber-seguridad) rigen los destinos y la transformación digital de los deportes en todo el mundo.
Los equipos que digitalicen sus actividades serán los primeros en obtener una significativa ventaja competitiva. En SAP hemos creado la Estructura Marco Digital para Atletas (Digital Athlete Framework), basada en SAP HANA, que aporta el poder para que los equipos deportivos puedan sacar provecho de enormes volúmenes de datos, provenientes de sensores, videos y redes sociales, conjugando todas las señales informativas y cruzándolas con gigantescos volúmenes de datos históricos para afinar predicciones y recomendaciones aplicables al estado físico y el desempeño de cada uno de los jugadores analizados. Una herramienta muy poderosa que está a disposición de una industria que mueve globalmente más de US$100.000 millones cada año.
¿Cuál es entonces el vínculo efectivo entre los pacientes de cáncer, los diabéticos y los atletas? Las montañas de datos inherentes. Tomen esto en consideración por un momento: durante una sola hora de entrenamiento de un equipo de fútbol, se captura y procesa un total de 77,7 millones de registros informativos.
Los desafíos que afronta la salud son de gran magnitud. Gracias a la tecnología de la información, se está convirtiendo en algo más personal, predecible y prevenible. Tal vez esto deja de ser tan sorprendente cuando se tiene en cuenta que este sector, por sí solo, genera cerca del 30% de todos los datos disponibles en el mundo.
Nunca vamos a dejar de generar datos. Cada latido, cada trayecto, cada compra y cada interacción aportan su grano de arena a las crecientes playas de la información. En mi condición de diabético que trabaja para una firma de alta tecnología, me entusiasma saber que hemos desarrollado las herramientas que nos están permitiendo sumergirnos en ese inmenso océano de ruido que generan los datos, aislar la información útil y compartir las lecciones aprendidas con el planeta entero, haciendo que la vida de cada ser humano sea más satisfactoria y plena.