Isla está situada a unos 60 kilómetros de la costa de la prefectura de Fukuoka en el mar de Genkai.
El 9 de julio de 2017 el Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO anunció el registro oficial de la Isla Sagrada de Okinoshima y sus lugares relacionados en la región de Munakata en su lista del Patrimonio de la Humanidad.
Okinoshima está situada a unos 60 kilómetros de la costa de la prefectura de Fukuoka en el mar de Genkai. Entre los siglos IV y IX tuvieron lugar en ella grandes rituales para rezar por el éxito en el comercio y por una navegación segura para los barcos que recorrían los mares entre Japón, Corea y China.
Se han descubierto alrededor de 80.000 ofrendas en Okinoshima, incluyendo anillos de oro de la península coreana y fragmentos de un bol de cristal tallado que se cree fue creado en Persia.
Todos estos descubrimientos han sido designados como tesoros nacionales. La isla en sí es considerada un lugar sagrado que forma parte del Gran Santuario de Munakata en la isla principal de Kyūshū.
Existen numerosos tabúes asociados con la isla. No se permite poner el pie en la isla a las mujeres, y hay restricciones también a las visitas de los hombres, incluyendo el requisito de realizar abluciones en el mar antes de pisar tierra.
Japón cuenta ahora con 21 lugares reconocidos como Patrimonio de la Humanidad, incluyendo sus cuatro bienes naturales. En 1972 la Asamblea General de la UNESCO creó la Convención sobre la Protección del Patrimonio Cultural y Natural (la Convención del Patrimonio Mundial). El Patrimonio de la Humanidad son los bienes inmuebles como los monumentos, paisajes y parajes naturales registrados en la lista del Patrimonio Mundial, designada por dicha convención, cuyo notable valor universal debería ser compartido por toda la humanidad.
En diciembre de 1993 se incluyeron por primera vez dos lugares de Japón al mismo tiempo como Patrimonio Cultural de la Humanidad: los monumentos budistas de la región de Hōryū-ji (prefectura de Nara), y el castillo de Himeji (prefectura de Hyogo). El 16.º sitio fue registrado en 2016, con el reconocimiento del Museo Nacional de Arte Occidental como parte de “La obra arquitectónica de Le Corbusier, una contribución excepcional al Movimiento Moderno”.
Los primeros dos bienes naturales de la humanidad de Japón fueron reconocidos en 1993: Yakushima (prefectura de Kagoshima) y Shirakami Sanchi (Prefecturas de Aomori y Akita). A ellos le siguieron Shiretoko (Hokkaidō) y las islas Ogasawara (perteneciente a Tokio), aumentando el número total de sitios a cuatro.