US$ 100 costará un frasco de marihuana medicinal uruguayo en las farmacias, la mitad que pagan hoy los pacientes por importar.

"En Uruguay, a cuatro años de la ley, la marihuana medicinal brilla por su ausencia". Así definía el diario The New York Times, en julio de este año, la situación del cannabis con fines terapéuticos en el país. Mientras la droga recreativa ya estaba a la venta en las farmacias, los pacientes que consumen extractos de la planta para aliviar síntomas de enfermedades como la epilepsia, el párkison, la fibromialgia, entre otras afecciones, no tenían alternativas nacionales legales y debían importar los productos a más de US$ 200 por mes.

Sin embargo, las autoridades decidieron apretar el acelerador y poner a andar la otra pata del proyecto del gobierno de José Mujica. Una vez solucionada la venta recreativa, pensaron que era hora de ocuparse de la medicinal.

Entonces hicieron una consulta pública a finales de julio para producir aceite de cáñamo -que no tiene efectos psicoactivos- y comenzaron a transitar los pasos necesarios para que los pacientes pudieran conseguir el producto en el mercado local.

Fuentes del Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircca) dijeron a El Observador que en los últimos cuatro años crearon toda la normativa necesaria para sacar adelante el mercado de cannabis medicinal. Explicaron que no había ningún país en el mundo que controlara la cosecha y la producción de estos compuestos, por lo que Uruguay tuvo que consultar a distintos expertos para lograr un marco legal que estuviera "aterrizado" a la realidad nacional.

US$ 100 costará un frasco de marihuana medicinal uruguayo en las farmacias. Los pacientes pagan actualmente más de US$ 200 cada vez que lo importan

Hoy, la burocracia ya "está pronta". El país pasó a una siguiente fase y empezó a entregar las licencias para cosechar flores con fines medicinales. Ya hay nueve empresas que obtuvieron los permisos para plantar cáñamo industrial, que podría ser utilizado con fines medicinales por su alta concentración de cannabidiol (CBD), el compuesto que tiene propiedades curativas.

Además, una empresa de capitales uruguayos y estadounidenses llamada Folmer consiguió una licencia para plantar marihuana con altos valores de tetrahidrocannabinol (THC), el componente que produce los efectos psicoactivos asociados a la droga. Esta compañía ya está en condiciones de cosechar el cannabis y, según afirmaron las fuentes, está interesada en la investigación. La idea es producir genéticas y estudiarlas, para conseguir extractos medicinales nacionales y de calidad.

Esta firma, sin embargo, no tramitó los permisos para vender el producto en las farmacias. El plan es comercializar los compuestos una vez que hayan mejorado las genéticas, lo que podría tardar años. Cuando la empresa decida empezar a vender, tendrá que solicitar la licencia de industrialización.

En acción

Si bien hay más de 20 firmas interesadas en la comercialización de cannabis medicinal, hasta el momento solo una consiguió los permisos para iniciar la venta. Se trata de una compañía local que importará los extractos de Suiza y los embotellerá en Uruguay. Aunque la producción no será nacional, esta compañía será la primera en colocar el producto en las farmacias. Las autoridades estiman que costará US$ 100.

20 firmas mostraron interés en empezar a producir marihuana con fines terapéuticos en el país. Solo dos obtuvieron permisos estatales

La directora de Salud del Ministerio de Salud Pública (MSP), Raquel Rosa, dijo a El Observador que esta empresa podría iniciar la venta en diciembre. Explicó que el MSP trabajó en los últimos meses para asegurar la calidad de los productos, porque buscan que los pacientes sepan con certeza qué componentes tendrán los extractos.

La jerarca reconoció que los tiempos en el proceso "no fueron los ideales", pero hizo hincapié en que el ministerio trató de "allanar el camino" para que el mercado de cannabis medicinal se activara. "El MSP, en particular, lo que ha hecho es acompañar todas las iniciativas, muchas veces aprendiendo juntos", señaló.

Con los trámites listos, ahora resta ver cómo se pone en marcha la venta. En el gobierno miran con expectativa el proyecto, que podría también tener consecuencias positivas en la economía. En ese sentido, fuentes del Ircca afirmaron que hay empresas que ofrecieron hasta US$ 30 millones en inversión. Sin embargo, optaron por mantenerse cautos hasta que las iniciativas se formalicen.

También podrían reactivarse distintas zonas rurales del interior. Un informante expresó que algunas de las compañías prevén instalarse en áreas que estuvieron "dejadas de lado" en los últimos años, por lo que las cosechas traerían nuevos empleos.

Los tiempos en el proceso "no fueron los ideales pero se apostó a asegurar la calidad de los productos", afirmó Rosa

A gran escala, el máximo objetivo del gobierno es que Uruguay sea un referente en cannabis medicinal en el mundo. El principal competidor es Colombia -que también tiene un marco legal adecuado- y habría que "ganarle" el mercado. Las autoridades locales confían en que la calidad estará a la altura.

Consultorio exprés

Una nueva edición de la Expocannabis tendrá lugar en el LATU entre el 8 y el 10 de diciembre. Los organizadores sumaron este año un "consultorio de orientación", en el que los visitantes tendrán la posibilidad de conversar con profesionales especializados en medicina cannábica. El público podrá agendar una consulta sin costo e informarse sobre tratamientos con marihuana. También habrá conferencias y charlas sobre este tema.