Fondo Nacional de Recursos evalúa a qué niños se le entregará el dispositivo que sustituye las inyecciones diarias.
El Fondo Nacional de Recursos (FNR) incluirá entre sus prestaciones la bomba de insulina para los niños que padecen diabetes tipo 1, es decir, aquellos que deben inyectarse insulina todos los días para poder sobrevivir. Este dispositivo se coloca en el abdomen y por medio de un catéter suministra la hormona de forma continua a lo largo de la jornada. Sin embargo, solo nueve niños en la actualidad lo utilizan porque su precio oscila entre US$ 8 mil y US$ 10 mil.
El organismo brindará también los recursos necesarios para el mantenimiento de la bomba. El aparato tiene el tamaño de un celular y consta de dos partes: una computadora que se programa para entregar la hormona y un catéter que la suministra al cuerpo. Los repuestos deben cambiarse con asiduidad y tienen un costo mensual de hasta US$ 800.
Por ese motivo, los pacientes que en la actualidad utilizan el dispositivo son los que pueden pagar el precio inicial y su manutención. Sin embargo, en el FNR consideran que hay niños con diabetes tipo 1 que son pacientes de riesgo ya que no pueden regular los niveles de insulina con inyecciones, por lo que trabajan para brindarles el aparato a través del Plan Integral de Atención en Salud (PIAS).
La coencargada de Dirección Técnico-Médica del FNR, Rosana Gambogi, dijo a El Observador que este lunes mantuvieron una primera reunión con el único importador de bombas de insulina que hay en Uruguay. El organismo todavía no maneja una fecha de cuándo podrán empezar a distribuir el dispositivo entre los niños que serán cubiertos, porque primero quieren verificar que la empresa tenga la cantidad de dispositivos que se necesitan.
Gambogi señaló que "es difícil" establecer parámetros de edad en pacientes pediátricos, por lo que tampoco decidieron aún quiénes serán los que podrán acceder a la bomba.
La médica hizo hincapié en que el aparato "no es magia que soluciona todos los problemas de los diabéticos". De hecho, afirmó que este dispotivo requiere un compromiso de las familias, sobre todo en el caso de los niños, porque los pacientes que lo utilizan deben ser controlados de forma permanente.
"Es importante que el equipo médico realice un seguimiento de cómo responde el paciente a la bomba y eso también requiere un entrenamiento para ajustar las dosis", sostuvo.
Además, consideró que si bien el dispositivo sustiye las inyecciones diarias que reciben las personas insulinodependientes, el resto de las medidas de precaución deben ser atendidas. Es importante que los pacientes realicen ejercicio, mantengan una alimentación saludable y reciban apoyo de las familias y de los médicos.
Las personas con diabetes tienen más riesgos de desarrollar graves problemas de salud, que pueden afectar al corazón, los vasos sanguíneos, los ojos o nervios, que pueden terminar en amputaciones por infecciones o úlceras.
Adelantados
La Asociación de Diabéticos del Uruguay (ADU) le iba a presentar este martes al ministro de Salud Pública, Jorge Basso, una petición para que la bomba de insulina fuera incluida en el PIAS para los pacientes de riesgo.
La idea de la asociación es que el FNR le brinde el dispositivo a los niños con diabetes tipo 1 asintomáticos, es decir, aquellos que no muestran signos de la enfermedad y tienen complicaciones vinculadas a la falta de insulina. También proponen que las embarazadas con diabetes tipo 1 accedan al aparato. Según números de la ADU, unos 200 niños y otras 100 mujeres califican para conseguir el dispositivo sin costo.
En total, hay 300 mil uruguayos que padecen diabetes. De ellos, el 10% es insulinodependiente porque la enfermedad es autoinmune, ya que el cuerpo destruye a las células que producen insulina.