Uruguay sostiene que la reconstrucción de Haití debe estar liderada por las Naciones Unidas y no por un país en particular, según declaraciones del canciller interino Nelson Fernández.

Montevideo."Tenemos que coordinar y es Naciones Unidas quien tiene que liderar; esa es la posición de Uruguay", dijo este viernes el canciller interino uruguayo, Nelson Fernández, en una rueda de prensa cuando se le preguntó qué opinaba sobre las atribuciones de Estados Unidos de asumir esa responsabilidad en el devastado país caribeño, según publica DPA.

Uruguay copatrocinó esta semana una propuesta de la República Popular de China para "reafirmar el rol de Naciones Unidas como coordinador de toda la ayuda internacional", remarcó Fernández.

La posición uruguaya será llevada el próximo lunes a la ciudad canadiense de Montreal, donde se van a reunir representantes de 15 países "amigos de Haití", con el fin de coordinar la estrategia futura y la mejor forma de ayudar.

En ese encuentro se harán propuestas entre las que se encuentra la del ex ministro de Defensa, José Bayardi, de reunir un dólar por cada habitante de los países de Latinoamérica, a los efectos de formar un fondo que llegaría a los US$560 millones de dólares anuales, aproximadamente.

"Es una buena propuesta" dijo Fernández e insistió en que toda la ayuda debe ser coordinada para que sea eficaz, de manera de que no se superpongan ni se malgasten o inutilicen los recursos disponibles.

El canciller interino informó que en su país "hay varios elementos disponibles" para enviar a Haití, como las dos usinas potabilzadoras de agua, pero "no se puede entrar a mandar cosas y gente sin una coordinación adecuada".

Uruguay trazó una línea de acción en contacto directo con la ONU, organismo ante el que pone a disposición toda la infraestructura para estos casos de emergencia, y el personal humano que sea necesario "de acuerdo a sus posibilidades", según declaraciones reproducidas por El Universal.

Estados Unidos dijo este viernes que la presencia de sus tropas en Haití será "a largo plazo", con el objeto de ayudar al país caribeño a recuperarse del devastador sismo, según declaraciones del embajador adjunto estadounidense ante la ONU, Alejandro Wolff.