Un equipo de médicos de urgencias utilizaron el dispositivo que utilizaba un paciente para obtener información de su monitoreo de ritmo cardíaco. 

Cluster Salud. Los smartphones y los monitores de fitness son cada vez más comunes. Son populares entre personas que realizan actividad física para tener un registro de su desempeño físico. Ahora, esta información también podría tener beneficios para la salud.

Un estudio publicado en línea en Annals of Emergency  Medicine, reporta el primer caso en que se utilizó un monitor de actividad y el smartphone de un paciente para determinar el momento exacto en que la persona había tenido una arritmia. Basados en estos datos, se determinó qué procedimiento se debía seguir.

De acuerdo al autor, el doctor Alfred Sacchetti, del Our Lady of Lourdes Medical Center de Camden, el dispositivo del paciente tenía registrado el momento en que su ritmo cardíaco había subido de 70 a 190. Gracias a esto, determinaron que el paciente seguía dentro del período de 48 horas en el que se puede aplicar una conversión de ritmo, por lo que realizaron una cardioversión y pudieron enviarlo a su casa.

El paciente tenía 42 años, con un historial de convulsiones pero no de enfermedades cardíacas y tampoco tenía episodios previos de fibrilación auricular. Cuando entró a urgencias, sus latidos por minuto estaban entre 130 y 190, pero bajaron a 80-100 luego de tomar oxcarbazepina y diltiazem.

Cuando el personal del servicio de urgencia revisó la aplicación del teléfono del paciente, descubrió que la fibrilación había ocurrido tres horas antes de llegar, por lo que aplicaron la cardioversión que le permitió ser dado de alta.

Sacchetti remarcó que no todos los dispositivo de monitoreo deportivo incluyen el ritmo cardíaco como el de este caso, un Fitbit, pero que es la información más importante en términos de salud.