Según el ránking de clínicas y hospitales de AméricaEconomía, cuatro del top diez son colombianos.
Todos los años la revista AméricaEconomía publica un ranking que muestra cuáles son los mejores hospitales y clínicas de América Latina. En las últimas ediciones la primera posición la suele ocupar una institución brasilera: el hospital Albert Einstein, ubicado en la ciudad de Sao Paulo. Sin embargo, poco a poco, Colombia ha empezado a abrirse un importante espacio. Veinte de las 49 entidades que destaca ese escalafón, son colombianas.
Como sucedió en 2016, la Fundación Valle de Lili, de Cali, aparece como la mejor posicionada, en el tercer puesto, seguida por la Fundación Cardioinfantil de Bogotá que está ubicada en el sexto lugar. La Fundación Cardiovascular de Colombia, en Bucaramanga, y el Hospital Pablo Tobón Uribe, de Medellín, completan la lista de instituciones que están en el top diez. Éstas ocupan el octavo y el noveno puesto, respectivamente.
Como lo señala la Asociación Colombiana de Clínicas y Hospitales, en el ranking sólo hay dos entidades públicas. El Hospital General de Medellín, que pasó del puesto 29 al 26, y el SES Hospital de Caldas, que aparece en el 46.
Pero, ¿cuál es el secreto de estas instituciones para ser reconocidas como las mejores de Latinoamérica? Aunque entran muchas variables en juego, en el caso del Hospital Albert Einstein, de Brasil, la estrategia, como lo anota la revista América Economía, ha sido integrar varios factores: “Educación, investigación, transparencia y acción comunicativa por parte del hospital hacia la comunidad durante todo el proceso de atención médica”. Lo que pretenden es “generar esquemas inmediatos de creación de información y acciones relevantes para evitar eventos adversos, ex ante y no ex post, como pasa con el modelo de satisfacción”.
En palabras de Sidney Klajner, presidente del Albert Einstein, citadas por esta revista, “varias otras iniciativas de experiencia del paciente nos han permitido tener pacientes informados y comprometidos, lo que ha impactado positivamente nuestros indicadores de seguridad y transparencia”.
De hecho, el estudio destaca que el 76% de los hospitales que lograron meterse en el ranking, han “creado escenarios de participación y comunicación activa con pacientes, familiares, amigos y hasta mascotas (…) Éstos permiten desarrollar formas permanentes de educación hacia los pacientes y sus familiares, informando acerca de sus derechos y deberes, y aspectos clínicos relevantes”.