Mediante una conversación telefónica, Venezuela acusó al gobierno de Barack Obama de no diferenciarse del mandato anterior, esto en relación a los malos tratos y amenazas recibidas. Sin embargo, manifestó su disposición a dialogar.
El jefe de la diplomacia estadounidense para América Latina, Arturo Valenzuela, y el ministro de Relaciones Exteriores venezolano, Nicolás Maduro, mantuvieron este viernes su primera conversación en la que concordaron en la necesidad de mantener el diálogo entre ambas partes.
Según informó una fuente diplomática venezolana, la conversación telefónica fue "franca y directa" y se produjo a instancias de Valenzuela, que necesitaba consultar con Maduro unos asuntos consulares de importancia menor.
El ministro sostuvo a Valenzuela que este período del gobierno de Barack Obama no se ha diferenciado mucho del anterior porque Venezuela ha sido objeto de amenazas, constantes injerencias y ataques por parte de diferentes instancias de poder en Estados Unidos". Asímismo, reiteró su manifiesto descontento respecto al trato que tiene Venezuela en la región. En este sentido, indicó que es visto como “país obstáculo, como un enemigo”.
No obstante, "Maduro reiteró que el gobierno venezolano está dispuesto a dialogar de forma franca pese a las diferencias existentes con Estados Unidos, siempre y cuando este diálogo se lleve a cabo en un marco de respeto a nuestra soberanía, instituciones y a nuestro proceso político", explicó, según declaraciones reproducidas por El Nacional de Venezuela.
Por su parte, Valenzuela fue "muy diplomático", "escuchó" a Maduro, y "afirmó que el nivel de diálogo debe mantenerse", agregó.
En este sentido, el gobierno venezolano tuvo pésimas relaciones con el ex presidente estadounidense George W. Bush y la tensión pareció rebajarse con la llegada al poder de Obama, con el que el presidente Hugo Chávez pudo conversar brevemente en la Cumbre de las Américas de Trinidad y Tobago en abril de 2009.
No obstante, recientes informes estadounidenses sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela o la supuesta falta de colaboración del país sudamericano en la lucha contra el narcotráfico han vuelto