La malaria es la enfermedad tropical parasitaria transmitida por mosquitos más importante y mortífera del mundo y mata a aproximadamente 1 millón de personas y afecta hasta a 1.000 millones de personas en 109 países de África, Asia y América Latina.
En el informe anual sobre paludismo de la Organización Mundial de la Salud, se estima que solo en 2017 se registraron 655.000 casos por enfermedad transmitida y 790 muertes. En el reporte divulgado el 19 de noviembre, la OMS concluyó que Venezuela es el país con el aumento más dramático de casos de malaria (53%) seguido de Brasil (22%), Colombia (8%) y Perú (7%).
Pero el doctor Oscar Noya, coordinador del Centro de Estudios sobre Malaria, de la Universidad Central de Venezuela (UCV), cree que esa cifra no le hace justicia a la epidemia de malaria en el país vecino.
Según le dijo Noya al medio local, Efecto Cocuyo, “hay un número de subregistros” importante que no está reflejado en el reporte divulgado por la OMS”.
El doctor estima que hay 2 millones de casos de infecciones, incluyendo las recaídas. También manifiesta que hay pacientes que la han padecido tres o cuatro veces, y que incluso, hay personas que nunca reciben tratamiento.
Ambos informes contradicen el reporte oficial del Gobierno de Venezuela, que en 2016 reportó 245.000 casos y una muerte, mientras que la OMS estimó que, en realidad, el número de contagios ascendió al menos a 300.000 y el de decesos a 280.
La OMS ha dado luces sobre su subregistro. Cuando se lanzó el informe, los voceros dijeron que hay nuevos casos en Colombia en las zonas abandonadas por guerrilleros desmovilizados y donde nunca antes se habían hecho controles epidemiológicos, o focos puntuales en Brasil y Ecuador. Incluso, cuando el Ministerio de Salud de Colombia publicó los lineamientos para la detección y tratamiento de la malaria, reconoció que había un 60% de subregistro, según sus cálculos.
De acuerdo con Efecto Cocuyo, el doctor dijo que por primera vez desde que empezó la crisis en Venezuela, el Centro de Estudios para la Malaria fue dotado con cloroquina y primaquina, ambos tratamientos antimaláricos.
La malaria es la enfermedad tropical parasitaria transmitida por mosquitos más importante y mortífera del mundo y mata a aproximadamente 1 millón de personas y afecta hasta a 1.000 millones de personas en 109 países de África, Asia y América Latina.