El riesgo país de Venezuela subió 350 puntos en un mes, dejando al índice en 1.000 puntos, muy por encima del promedio de Latinoamérica, que se encuentra en 250.
Caracas. La percepción de Venezuela en los mercados internacionales está en detrimento. El Riesgo País (EMBI+) subió en un mes 350 puntos, es decir, 40%, según cálculos del banco de inversión JP Morgan.
Este índice está 1.000 puntos por encima del promedio de Latinoamérica, que se encuentra en 250 puntos. Incluso, Venezuela está en este momento por encima de Argentina, cuyo riesgo país es de 810 puntos, y que ha dejado de pagar compromisos.
Desde la segunda semana de mayo cuando la Asamblea Nacional aprobó en primera discusión la reforma de la Ley contra Ilícitos Cambiarios, los tenedores de bonos de deuda venezolana comenzaron a salir de estos papeles en los mercados internacionales.
Esta normativa establecía la supervisión y regulación del Banco Central de Venezuela (BCV) en el mercado alternativo de divisas. Sin embargo, cuando se anunció que este nuevo sistema excluiría a las casas de bolsa y sociedades de corretaje, la tendencia se acentúo. Y un mercado en el que la oferta de estos papeles aumenta, el precio por lógica baja. De hecho, en promedio el precio de los bonos globales de referencia han caído desde el 20 de mayo hasta el primero de junio 4,5%, según corredores del mercado.
Las señales. La incertidumbre que por estas tres semanas se vive en cuanto al esquema cambiario del BCV es una de los fenómenos que produjo este comportamiento, por lo menos así lo cree el economista Pavel Gómez: "Mientras se paraliza el mercado de títulos aumenta la percepción de riesgo de los bonos de deuda nacional y produce caída en los precios".
El especialista indica que para los inversionistas la situación cambiaria actual de Venezuela podría ser "una señal de insolvencia", lo que refleja que el Estado tiene menos recursos de lo que se estimaba.
En efecto, según la Ley de Presupuesto, en el primer trimestre de este año el Gobierno esperaba ingresos fiscales petroleros por el orden de Bs.F. 10,1 millones, pero la recaudación real registrada fue 30% menor.
"Hay que recordar que el riesgo país no mide toda la economía sino que refleja la percepción que tienen los tenedores de bonos de la capacidad de pago del tenedor", indicó Gómez.
La crisis financiera que sufre Grecia y que salpica el resto de los países europeos también influye en el comportamiento de los títulos de deuda pública.
Aunque el economista aclara que sólo en cuanto a la "expectativa de reducción de precios del petróleo" en la medida en que este fenómeno se relacione con la capacidad para cumplir los compromisos adquiridos.
Deuda encarecida. Las consecuencias se sienten en la reputación de Venezuela en los mercados internacionales. "Cada vez es más caro endeudarse", dice Gómez.
El especialista se refiere a que el aumento del riesgo país implica pagar intereses más altos en caso de que el Estado necesite ejecutar nuevas emisiones de deuda para financiarse.
Pero para el economista Alejandro Gómez, este escenario no ocurrirá; augura una recuperación de los papeles venezolanos apenas el ente emisor le dé apertura al nuevo esquema cambiario: "Hay que esperar que el BCV permita el acceso a bonos y dólares. Si establece un sistema sólido, el mecanismo funcionará bastante bien".
Gómez (Alejandro) opina que el indicador de Riesgo País sólo es "una estimación". "El JP Morgan hablaba bien de muchos de los bancos que cayeron en Estados Unidos eran y se fueron abajo".
Por ahora, lo que es un hecho, es que el mercado alternativo de divisas, que movía a través de títulos alrededor de $100 millones al día, tiene más de dos semanas paralizado.