El sector viñatero chileno está golpeado por los efectos que ha tenido la pandemia en la demanda y consumo globales de vino. Mientras China y otros mercados de Asia se recuperan lentamente, se vislumbran nuevas oportunidades, especialmente en el Sudeste Asiático, explicaron a AsiaLink.
Uno de los productos estrella de Chile en Asia es el vino, y más específicamente el vino de alta gama. Pero los últimos datos del gremio, agrupado en la asociación Wines of Chile, son poco auspiciosos en ese continente: las exportaciones de vino embotellado chileno en el mes de marzo disminuyeron un -8,4% en volumen y un -13,6% en valor, en comparación con el mismo mes de 2019. Esto se tradujo en 3,7 millones de cajas enviadas a un valor global de US$98,1 millones. El precio promedio también retrocedió y se situó en US$ 26,5/caja, lo que es una caída de -5,7%.
Esta drástica caída de las exportaciones a China (-36% en volumen y -40% en valor) no logró ser contrarrestada por el importante aumento de las exportaciones a otros mercados. Eso permitió que en estos meses EE.UU. se posicionara en el primer lugar, seguido de Brasil y Reino Unido, con China quedando en un inusual cuarto lugar.
Pero la asociación sabe que esta crisis será pasajera y que no pueden quedarse de brazos cruzados. En conversación exclusiva con AsiaLink, Angélica Valenzuela, Directora Comercial de Wines of Chile explicó sus siguientes pasos.
- Hasta hace muy poco, China era el principal mercado de los vinos chilenos. ¿Sigue siendo así?
Hace años que China superó a Estados Unidos, a Brasil, a Japón…pero en el mes de marzo sucedió algo bien especial; ese mes China tuvo una caída muy fuerte, que en el acumulado está acusando una caída de 24% en volumen y 18% en valor - y en ese mes específico pasó al cuarto lugar como destino, pero apostamos a que desde este mes de mayo debiera empezar a recuperarse, ya que el mercado chino representa el 16% de las exportaciones de vino chilenas.
- No es rara esa baja, teniendo en cuenta el factor COVID-19
Si, porque se generó un sobre stock para el arrastre del año nuevo chino, dado que no se consumió todo el vino que supuestamente se consume en esa fecha en que hay mucha fiesta, mucho banquete que la gente se mueve (por el país) y celebra. Al no suceder eso, obviamente los stocks quedaron más altos. Pero se ha ido reorganizando todo de forma paulatina; todavía no logramos obviamente recuperar las cifras previas al COVID-19. Se han planificado festivales gastronómicos, incluso ciertas ferias, pero existe todavía un sentimiento como de reticencia por parte del consumidor.
- De todos modos, el gobierno chino está dando señales de querer retomar las actividades económicas normales lo antes posible
Sí, hay varias señales. Por ejemplo 107 millones de estudiantes ya están en clases desde el 2 de mayo; los vuelos se recuperan al 43% de su capacidad…Pero obviamente hay cosas que hay que ir con cuidado. Nuestra asociación está haciendo muchas cosas en China desde ahora y con miras a octubre o noviembre. Todo va a ser virtual: estamos haciendo promociones para potenciar el e-commerce, tenemos planificadas masterclasses virtuales, estamos haciendo clases a consumidores y a profesionales del vino también, estamos generando mucho trabajo a través de redes sociales, haciendo videos por tik tok; estamos de alguna manera contactándonos con los consumidores de tal manera de hacerlos sentir que el vino chileno está con ellos.
- En octubre estaba planificada una nueva versión Chile Week en China (que realiza el gobierno chileno desde 2015) ¿sigue en pie?
Justamente, la idea es hacerlo coincidir con nuestras actividades, para potenciarnos. Tenemos dos actividades grandes y una es el 90 + que es una actividad donde estarán 40 viñas y donde vamos a tener un trabajo bien importante para mostrar todos aquellos vinos con más de 90 puntos en reputados concursos. Eso lo vamos a hacer obviamente virtual, no presencial, pero es bien interesante porque este tipo de plataformas te permiten tener una chance mucho mayor de visibilidad. Vamos a hacer videos con los enólogos desde Chile, la gente puede recibir antes el producto físico. Lo interesante ahí es que tú logras presentar los mejores productos de Chile, tenemos a tres importantes speakers chinos, a los principales periodistas y compradores de las ciudades más importantes de china. De hecho, para nuestro roadshow una de las ciudades elegidas es Wuhan, porque queríamos hacer algo simbólico y creemos que esto puede ser súper atractivo y además da un espaldarazo de apoyo para reflejar la calidad y la diversidad de los vinos chilenos.
- En cuanto a las cifras de exportaciones, siempre se hace la diferencia entre China continental con Hong Kong, ¿por qué?
Lo que pasa es que Hong Kong es súper distinto a China. Es un mercado mucho más sofisticado Un dato muy relevante es que hacia 2018, la isla era el primer mercado para los vinos de Bordeaux en el mundo, o sea es un mercado de imagen y de posicionamiento; cuando tú quieres lanzar un nuevo producto en Asia, partes por Hong Kong. De hecho, la Vinexpo Hong Kong es, después de ProWein de Dusseldorf, la más importante del mundo en vinos. Pero las cosas hoy en la isla no van bien, hay una crisis política, está el COVID-19, la ocupación hotelera solo llega al 7%...
- Para muchos el temor es que los inversionistas se terminarán yendo a Singapur…
Exactamente, y por eso la Vinexpo Hong Kong terminó por posponerse para el 2021. Pero, a nivel general, para China nosotros estamos estimamos que se vaya recuperando. Sí creemos que vamos a llegar un rezago versus el año anterior estamos estimando entre un 15 y un 20% menos que el 2019 para China, debido a lo que no se consumió durante las fiestas y, por otro lado, hay que recordar que el crecimiento esperado en China era un 6% y ahora es un 2%, entonces, obviamente, va a haber un tema económico que va a demorar más cualquier reactivación.
CONSOLIDACION Y BÚSQUEDA DE NUEVOS MERCADOS
- ¿Qué está pasando en Corea del Sur, donde el segmento de vinos que se consumen es más premium que en China?
Corea del Sur tenido históricamente ha tenido precios muy altos. De hecho, el precio promedio en Corea es de US$30 y tuvo un decrecimiento en marzo de -3 en volumen y de -15% en valor, lo que significa que el precio promedio bajó un 13% en el acumulado todavía vamos bien: en volumen tienen un 7% pero en valor está bajando, pues ya lleva un -4,2%. Entonces a nivel de precio promedio también se ha visto afectado. Por eso es bien relevante entender que, dado que los países (en general) están más complicados, que están generando desempleo, estamos enfrentándonos a mercados más empobrecidos, mercados que van a tener, de alguna manera, que bajar su consumo a productos un poco más baratos. Corea del Sur para el vino chileno es un buen mercado, pero tenemos menor actividad que en China o en el resto de Asia, si bien es un mercado bien importante, básicamente porque se exportan vinos de alta gama, de alto valor.
- ¿Cómo se ve el caso de Japón, dado que es un país donde ya llegó la recesión?
El primer trimestre Japón va con un crecimiento acumulado de casi 18% en volumen y 16% en valor. Pero el desafío acá es doble. No sólo es la competencia que hay en el retail, sino que está el acuerdo económico con la UE, que logró que ellos bajaran sus precios de una manera muy fuerte al bajar los impuestos aduaneros. Entonces, Japón se ha convertido en un mercado de precios más bien bajos para los vinos europeos. Ahora, después del COVID-19, nosotros vamos a tener que trabajar muy fuerte la promoción, ya que es un mercado que está muy atomizado en cuanto a la distribución, hay mucha competencia y los consumidores básicamente están buscando productos de más bajo precio. Ahí nuestro enfoque será trabajar fuertemente en imagen, para así desarrollar mercado. Es importante destacar también que allá en Japón tenemos una posición muy importante de espumantes, con cerca del 60% de la producción, y estamos desarrollando una campaña piloto bien interesante.
- ¿Algún otro mercado asiático es de interés en estos momentos para los vinos chilenos?
A partir de lo que ha pasado con la pandemia, hemos trabajado bastante junto a ProChile en ir buscando nuevos mercados. Nuestra estrategia es mostrando vinos de alta calidad, y eso no se puede abandonar en la crisis, porque independiente de que a lo mejor la gente va a comprar vinos un poco más económicos, en la construcción de una imagen tú tienes que seguir reforzando que la calidad es muy importante para el país y que Chile tiene vinos de alta gama. Entonces, lo que estamos haciendo es prospectar nuevos negocios, buscando información de nuevos lugares como el sudeste asiático, porque tiene un fuerte componente turístico y tiene un gran atractivo y ventajas para los inversionistas. India también es un mercado claramente atractivo, a pesar de que hoy tenga altos aranceles es un mercado tremendo. Entonces estamos empezando alguna manera hacer actividades de educación allá para ir sembrando y así, a futuro se convierta en un mercado tan relevante como China.
EFECTOS DE LA PANDEMIA
- La pandemia es global, ¿cómo ven que ha afectado a otros países productores de vino que con competencia para Chile?
Yo te diría que están todos con caídas muy fuertes y que están todos volcándose a hacer actividades no presenciales y digitales. Pero los europeos están mucho más complicados que nosotros, porque la pandemia les pegó más fuerte; para ellos todo el trabajo de bodega y el trabajo de vendimia se complejizó bastante más, tuvieron más problemas para seguir cumpliendo con las órdenes y trabajando en forma más normal.
- ¿Y cómo fue la temporada vendimia en Chile?
La mezcla de altas temperaturas que tuvimos en primavera y en verano más además todo el tema de la sequía produjeron un adelanto de al menos dos semanas en las fechas de la cosecha. Además, las medidas de cuarentena coincidieron en plena vendimia, pero gracias a las coordinaciones con el gobierno pudimos sacarla adelante. Hoy podemos contar que, en términos de calidad, fue excelente; fue una vendimia de muy buena fruta, aunque un poco menor cantidad.
- ¿Cómo se está planteando el año 2020 y más allá Wines of Chile?
El gremio está bastante golpeado. Todos los canales on trade, a nivel mundial están cerrados. En algunos mercados como Estados Unidos se ha logrado suplir la baja de los restoranes y hoteles con los supermercados,e -commerce y el delivery. En mercados como China, a pesar de tener un e-commerce muy desarrollado, el vino no es de primera necesidad y no logra compensar la salida que tenían los bares y las grandes tiendas. Estimamos una caída de alrededor de un 20%, a nivel de cifras totales, pero estamos con muchas ganas de hacer cosas; hemos logrado mantener la comunicación con nuestros consumidores mediante las plataformas virtuales, con actividades de catas, de maridaje, de educación a la población. Y creemos que todas estas formas de comunicar van a quedar después, una vez que la pandemia pase.