Esta empresa de tecnología de origen chileno fue valorizada recientemente en US$79 millones en EE.UU., marcando un hito regional. Conversamos con su CEO, Edmundo Casas, para conocer más en profundidad el impacto de esta tendencia.
Por Cristián Aránguiz. Esta empresa de tecnología de origen chileno, especialista en Inteligencia Artificial (IA), fue valorizada recientemente en US$79 millones en EE.UU., marcando un hito regional. Con esta ‘condecoración’, ya se instala en Silicon Valley y a inicios de 2019 aterrizará en Alemania. Conversamos con su CEO, Edmundo Casas, para conocer más en profundidad el impacto de esta tendencia.
-¿Cómo nace la Idea de trabajar con IA?
-Kauel tiene más de diez años, naciendo en 2007. Y nace desde una base de desarrollo tecnológico muy fuerte, con personas que poseen grados de master y doctorado en materia de tecnología. Si bien al inicio la respuesta (del mercado) fue bastante lenta, ya que siempre cuesta instalar en la industria estos temas, finalmente, hace uno o dos años todo lo asociado a IA, Internet de las Cosas (IoT), realidad virtual, realidad aumentada, y todo lo que compone hoy la Industria 4.0, calzó justo con la base tecnológica que Kauel tenía armada desde sus inicios.
-¿Ahí se produce el vuelco en el negocio?
-Exacto. Como estas tecnologías se hicieron tan conocidas e inminentes, hoy deben aplicarse en las industrias, porque de no tenerlas, literalmente, entras en un riesgo. Ahí se dio un vuelco en el negocio de forma radical... Hoy, Kauel tiene cuatro líneas de negocio: Industria (energía, minería y producción), educación (automatizando procesos de aprendizaje mediante la realidad virtual), salud (sistemas de tomas de presión o pulsaciones a distancia) y retail, donde generamos IA y procesamiento de imágenes, productos más consumidos, comportamiento de compra, analítica sobre esos datos.
-¿Cuáles son sus productos principales?
-Estamos concentrados en IA y realidad virtual. Lo anterior es muy importante para la industria, porque al aplicar IA optimizas todos tus procesos y en gran medida eliminas el error humano, ya que las máquinas pueden hacer ese procesamiento; por otro lado, la realidad virtual elimina la infraestructura, y si analizas los problemas en las empresas, la mayor cantidad se da por error humano o falta de infraestructura. Por ello, cuando estas tecnologías resuelven estos problemas evidentes, se transforman en un negocio muy potente.
-¿Qué diferencia a Kauel de otros productos similares en el mercado internacional?
-Hoy Kauel es líder en ciertas soluciones tecnologías en la región. Por ejemplo, con IA. Hoy tomamos imágenes y les hacemos diferentes procesos en tiempo real. Hemos encontrado soluciones que aventajan a las demás compañías que están en el rubro.
-El proceso de internacionalización de Kauel ha sido también exponencial, insertándose hoy en mercados muy competitivos como EE.UU. y Europa. ¿Cómo ven su participación ahí?
-Acá hay un tema que es interesante de abordar: cómo operan las tecnologías hoy. Actualmente, todas las tecnologías se complementan. Por ejemplo, tú vas a entrar a una compañía y te vas a dar cuenta de que ahí se utiliza Google para algunas tareas, Microsoft para otras, IBM o SAP para diferentes requerimientos; por lo tanto, todas esas tecnologías conversan. En resumen, todas estas tecnologías se agrupan y son colaborativas. Veinte años atrás nadie se iba a imaginar que Windows iba operar en conjunto con Linux. Bueno, en ese escenario de conversación de las tecnologías, Kauel entra a ser el corazón de varias de estas. Por ejemplo, dando servicios de realidad aumentada para smartphones o servicios para Microsoft desarrollando IA que permita capturar información para diferentes procesos. Sumaría otra variable muy importante que nos da una ventaja: la escasez del conocimiento en estas nuevas materias…
-¿No hay la cantidad de profesionales para cumplir con la demanda para IA? ¿Es así?
-Sí, también lo creo. Se puede de decir que no existe la capacidad mundial para dar solución a toda la demanda de IA por la falta de profesionales del área. Entonces, las grandes economías como EE.UU. y Europa deben atraer a empresas de distintas partes del mundo, para que atiendan sus mercados.