Aunque se trata de un primer paso y de alcance reducido, en Seattle han conseguido decodificar el pensamiento con variables simples.

Por Antonio Sabán para ThinkBig. A día de hoy, el cerebro continúa siendo una de las partes del cuerpo de las que se tiene menos conocimiento. Pese a que hay avances, la información contenida en él sigue siendo muy inaccesible. Por ello, actualmente se trabaja en diversos proyectos para lograr conectar nuestros pensamientos con soluciones informáticas, buscando, sobre todo, mejorar en aspectos de comunicación con personas discapacitadas en el habla. En ese sentido, investigadores liderados por Rajesh Rao, de la Universidad de Washington en Seattle, han conseguido decodificar el pensamiento de personas basándose en señales eléctricas.

Gracias a unos electrodos implantados en el cerebro de las personas con las que se está llevando a cabo la investigación, los neurocientíficos pueden decodificar el pensamiento en cuestión de 20 milisegundos. Sin embargo, pese a que se trata de un gran avance, hay que matizar los resultados. Los implantes se han realizado en 7 individuos que sufren epilepsia, y en principio se llevaría a cabo para detectar el origen de los ataques epilépticos. Para ello se instalan en el lóbulo.

Esta ocasión se les preguntó si adicionalmente a ponerse los electrodos accederían a realizar una prueba con la que cierta información de su cerebro sería revelada. Accedieron, y conectaron a un ordenador que procesaba mediante un potente software que analiza las señales eléctricas que enviaba el cerebro a un ritmo de 1000 veces por minuto, pudiendo descifrar, con un 96% de acierto si la persona estaba viendo una cara o un hogar. Además se les dijo que prestaran atención a una casa que estaba rotada boca abajo, como una variable más para decodificar el  pensamiento.

Parece que en el proceso de discriminar esas figuras utilizamos distintas neuronas claramente delimitadas, lo que explica que se pueda saber tan rápidamente. El ordenador necesitaba, eso sí, dos tipos de señales para concluir efectivamente el resultado. Por una parte, un potencial relacionado con evento (ERP) y por otra parte un cambio espectral que es detectado por los electrodos como un cambio general en la energía en la región cerebral.

Pese a que de momento estas técnicas no tienen usos más avanzados que los mencionados, sí es importante recalcar su relevancia futura en el sentido de que se va a ayudar mucho a estimular el cerebro, lo que resulta muy importante en personas con parálisis cerebral, problemas de habla o epilepsia.