A través de dicha tecnología, su compañía provee soluciones tecnológicas de certeza digital a distintos usuarios a nivel mundial, tanto de empresas como domésticos.
Por Cristián Yáñez W. Los sistemas basados en tecnología blockchain se expanden por las diversas industrias. Una de ellas es la relacionada a la certificación digital, donde puede blindar, por ejemplo, la firma de un contrato.
Es la apuesta transformadora de Signatura, una compañía que está irrumpiendo en este segmento, utilizando la cadena de bloques para dar certeza digital a distintos tipos de documentos.
Actualmente, Signatura brinda sus servicios a la banca y a la industria de la energía, pero también a personas individuales, mediante un creativo plan gratuito, que posibilita al usuario registrar cinco documentos por mes, y otros de pago, dirigido a documentos más complejos.
El cofundador y CEO de Signatura, Gonzalo Blousson, profundizó con AméricaEconomía sobre los servicios que entrega su compañía, el perfil de los clientes y de la transformación tecnológica que supone blockchain.
-¿Qué servicios entrega Signatura?
-Nos especializamos en proveer soluciones tecnológicas de certeza digital y aprovechamos las ventajas que da la tecnología blockchain de tener, por primera vez en la historia, un registro que nos permite garantizar la autoría, la fecha cierta y la inmutabilidad de la información digital que nosotros retenemos. Es un servicio integral con varios productos, donde el más completo y familiar para el usuario final funciona a través de una plataforma de registro y firma digital de documentos, es decir, permite subir un documento de una manera muy sencilla. Uno registra su usuario, y una vez dentro de la plataforma, esta te permite subir documentos, contratos, seleccionar las personas que tienen que firmar esos documentos, o puede ser uno mismo. Luego, cuando son firmados digitalmente, las pruebas de que han sido firmados quedan registradas en la blockchain para siempre.
-Y si su empresa dejara de existir, ¿qué ocurriría con esas pruebas?
-Si Signatura, el día de mañana, no estuviera, en el caso de una disputa las pruebas tecnológicas serían legales, porque siempre van a estar registradas y disponibles para todos los usuarios en la blockchain. Ese es nuestro producto más amigable y orientado, tanto a usuarios finales como corporativos, que no tienen una plataforma de manejo de documentación digital. Y, por otro lado, tenemos un soporte más de tipo tecnológico que es una serie de guías de programación y herramientas para que una empresa que ya tiene un software de documentación, procesos de workflow que emite certificados de estudio o diplomas, o tiene un software propio, pueda integrar de manera sencilla esta tecnología y conectarlo con nuestro sistema.
-¿Cómo funciona la seguridad en la blockchain?
-Nosotros no sabemos qué es lo que los clientes están resguardando, porque lo único que estamos registrando en la blockchain es la firma digital, es decir, quién firmó y la huella digital del archivo. Lo que almacenamos en la blockchain se registra en un bloque específico, con un orden específico, lo que nos permite garantizar la fecha cierta. Es decir, nosotros garantizamos la autoría, representada en este caso por la firma digital; la integridad de la información, representada por la huella digital del archivo; y la fecha cierta, representada por el orden, el bloque dentro de la blockchain donde se grabó esa información.
-¿Con cuántos clientes trabajan actualmente?
-Hoy tenemos alrededor de 3.000 usuarios en todo el mundo, principalmente en Europa y Estados Unidos, y ahora nos estamos enfocando en un desembarco en Latinoamérica. Para eso tenemos un equipo de abogados que son nuestros asesores legales dentro de la compañía. No son abogados corporativos, sino que asesoran a nuestros clientes en las mejores prácticas para ver cómo utilizar Signatura y que ese servicio se adecue a los requisitos legales de cada país.
TECNOLOGÍA NOTARIAL
Una de las áreas donde podría funcionar la tecnología ofrecida por Signatura es en el campo monopólico de las notarías, las que a través de sus notarios certifican manualmente un gran número de documentos y firmas. Sin embargo, Blousson aclara que aún no pretenden incursionar en este sector por su complejidad y que realmente no les interesa reemplazar la figura del notario. “Hoy nos estamos enfocando principalmente en grandes empresas que firman altos volúmenes de contratos. Principalmente, porque somos una empresa pequeña y no podemos atacar todo el mercado”, reconoce.
-Ustedes pueden certificar firmas digitales, ¿cómo lo hace un notario?
-Nosotros no somos una entidad certificante, homologada por el Estado, pero sí cumplimos con todos los estándares internacionales para la firma digital. Funcionamos como una compañía que usa la tecnología de firma digital, con el agregado extra de hacer la certificación de fecha e inmutabilidad con blockchain, lo que no quita que puedan combinarse. Esto significa que nuestra plataforma está preparada para una empresa que ya tiene certificados de firma digital, otorgados por una entidad certificante o homologada por un gobierno, y que desea usar esas firmas digitales con Signatura. Esas integraciones las podemos hacer con las compañías que nos quieran contratar.
"No confiar en blockchain es como no confiar en las matemáticas. Detrás de blockchain hay múltiples tecnologías, como firma digital, almacenamiento distribuido de información, etc. Son tecnologías probadas, pero bueno, existe el “terraplanismo”, así que alguien puede decir cualquier cosa".
-Existen notarios que son reacios al uso de la tecnología blockchain en su campo. ¿Qué les puede decir para que la adopten?
-Para empezar, en blockchain nunca se registran datos privados, porque como la blockchain es pública, uno no puede guardar datos personales. En todo el mundo hay leyes de protección de los datos personales, y si así fuera se estaría yendo en contra de esas leyes en casi todos los países. Por lo tanto, no hay posibilidad de que se roben información privada. Y no hay más riesgo de robo que el que existe hoy, porque esa información es resguardada de manera tradicional, en servidores de los propios escribanos, de notarios o de las personas, y no en la blockchain.
-¿Y no es insegura la tecnología, pensando en los millonarios robos que han existido en criptomonedas?
-El que se hayan robado fondos de las blockchain no es porque esta tecnología sea insegura. En realidad, es todo lo contrario. Los fondos se roban por malos manejos de las personas de sus claves, y no porque blockchain funcione mal. Blockchain, en el caso de bitcoin, está programada para que los fondos sean accesibles por quien tenga la clave privada o password. La clave permite mover estos bitcoins y la blockchain funciona como tiene que funcionar: le deja mover el dinero a la persona que tiene esa clave.
Cuando escucho que alguien no confía en la tecnología blockchain, como resguardo de información, generalmente esa persona no ha estudiado demasiado el tema. No confiar en blockchain es como no confiar en las matemáticas. Detrás de blockchain hay múltiples tecnologías, como firma digital, almacenamiento distribuido de información, etc. Son tecnologías probadas, pero bueno, existe el “terraplanismo”, así que alguien puede decir cualquier cosa.