Si Apple ha conseguido llegar a alcanzar el éxito que tiene hoy en día, es también gracias a Jonathan Ive, el diseñador que cambió la cara a los productos de la compañía de Steve Jobs.
Por Mar Peralbo para ThinkBig. Si hablamos de Apple, inevitablemente, tenemos que hablar de Steve Jobs, de la manzana, del Mac, del iPhone… y de su diseño. Una estética minimalista que ha llevado a esta empresa a la cabeza en cuanto a tecnología se refiere.
En todo ello mucho tiene que ver Jonathan Ive. Sus diseños han revolucionado el sector de la tecnología, y no se trata sólo de una cuestión de estética, sino de una forma de trabajar y de entender el diseño que lo han llevado a ser toda una figura dentro y fuera del sector digital.
Jonathan Ive es, posiblemente, el diseñador industrial más conocido a nivel mundial. Desde 2015 desarrolla el cargo de jefe de diseño de Apple, comenzando su andadura en la compañía de Cupertino como director artístico, allá por 1992. Su ingenio y su visión han permitido desarrollar, junto a Steve Jobs, toda una gama de productos que destacan por su estética y funcionalidad, un diseño innovador que ha dotado a los productos de Apple de un valor añadido.
Nació en 1967 en Chingford (Londres) y estudió Diseño Industrial en la Universidad de Northumbria en Newcastle. Empezó trabajando en la compañía Tangerine, donde diseñaba desde cepillos de dientes hasta microondas. Pronto se dio cuenta de que no era el trabajo de su vida y dejó éste para recalar en el gigante de los ordenadores.
El diseño como sello de identidad
De carácter sencillo y trabajador tenaz, Ive ha logrado llegar a la cima en un mundo donde lo digital se ha vuelto imprescindible. El minimalismo de sus diseños dicen mucho de su personalidad y carácter, buscando siempre la diferencia y no esperando hacer lo que ya estaba inventado.
Su relación con Steve Jobs fue elemental a la hora de trabajar, ya que le dio la confianza y libertad para hacerlo a su manera, apostando por su talento. Ambos consiguieron encumbrar a Apple a través de un diseño sencillo e innovador, y no sólo dando importancia al aspecto interno de la máquina, que por aquel entonces se centraba en la industria informática, sino dotando a sus productos de un hardware novedoso.
Ive es el diseñador de muchos productos de Apple: MacBook Pro, iMac, MacBook Air, Mac mini, iPod, iPod Touch, iPhone, iPad, iPad Mini, Apple Watch e iOS. “Estamos rodeados de objetos anónimos mal hechos. Te sientes tentado a pesar de que a las personas que los usan no les importa igual que a las personas que los hacen. Pero no. Nosotros hemos demostrado que a las personas sí que les importan esos objetos, por eso vendemos un número muy grande de cosas hermosas y bien hechas”, señalaba Ive en unas declaraciones.
iMac G3 da el pistoletazo de salida en 1998
El diseño de este ordenador fue uno de los primeros proyectos íntegramente realizados por Ive. Su carcasa de colores llamativos, su aspecto redondeado, e innovador envoltorio mediante el uso de plásticos translúcidos, fue el primer producto de Apple orientado al consumidor, dando comienzo a una saga de ordenadores.
Más tarde, iPhone supuso la gran transformación de Apple y la creación más conocida de Ive, una gama de teléfonos inteligentes que convierte a la empresa californiana de ordenadores en un grande de la electrónica de consumo.
La estética es una parte importante y fundamental a la hora de diseñar cada una de las piezas que componen sus productos y que han conseguido fidelizar a millones de usuarios fans de la manzana, diferenciándolos de los PCs.