El gerente general de IBM Chile conversó con AméricaEconomía sobre los desafíos de capacitar a sus trabajadores y acompañar a los clientes el proceso de la transformación digital.
Por Lino Solís de Ovando G. La transformación digital no llegó sola. Trajo consigo una obligatoria metamorfosis del talento en las empresas, una adaptación que requiere de reentrenamientos y adopción de nuevas habilidades. Todo al mismo ritmo que la digitalización. Pero ¿qué hacen los “IBMeistas” para estar a la altura de tamaña revolución? De eso y más conversamos con el líder de la multinacional en Chile, cuando se cumplen 90 años de su presencia en suelo local.
- Debido a la distancia inicial que existía con la transformación digital en las empresas, los altos ejecutivos de las compañías tecnológicas debieron evangelizar al mercado. ¿Cómo han sido para usted estos últimos dos años en Chile, llevando este mensaje?
- Chile se encuentra, desde hace ya varios años, atravesando un momento de transformación y reflexión en el mercado. Mientras los datos crecen de forma exponencial, tanto en volumen como en variedad, muchas oportunidades se abren en el país para nuevas tecnologías que están irrumpiendo digitalmente en los negocios y en la vida diaria de profesionales de diferentes áreas. Y en este proceso de transformación digital y cultural, los líderes de las empresas de tecnología tenemos un capítulo relevante que desarrollar en esa evangelización. En primer lugar, se trata de una triple transformación en la que convergen tres disrupciones al mismo tiempo: de negocios, de talento y de experiencia. Así pues, las empresas deben desarrollar su nuevo modelo de negocios en un contexto complejo, donde es difícil saber de dónde provienen sus nuevos competidores, quiénes son o cómo nacen. Por otra parte, requieren reentrenar y convertir su fuerza de trabajo actual para poder desarrollar las tareas que el negocio futuro requerirá. Esto, en un contexto de mayor presión por los resultados, necesidad de aceleración en el proceso, mayor flexibilidad y agilidad en la estructura organizacional, en sus procesos, en la toma de decisiones y la estrategia. Y, por sobre todas las cosas, entendiendo que la experiencia del usuario y el engagement son una ventaja competitiva en la actualidad.
Chile es un mercado maduro. La transformación digital ya es un hecho. Líderes públicos y privados tenemos el desafío de generar una sana discusión sobre cómo abordamos las nuevas tecnologías que conlleva la transformación digital como sociedad para beneficiarnos de ella y acelerar aun más el proceso de adopción, y a la vez, ser agentes de cambio en la redefinición de las industrias y profesiones, que acompañen las demandas del mercado y del país.
- Este abril se cumplieron 90 años de IBM en Chile. Una larga trayectoria, donde seguramente han tenido que transformarse más de una vez. Sin embargo, es sabido que debido a las tecnologías fundacionales que han irrumpido y a la transformación digital que las agrupa, las organizaciones han debido cambiar en los últimos dos o tres años a una velocidad nunca vista. ¿Cómo han vivido esta vorágine los llamados “IBMeistas”?
- El talento es la clave de cómo IBM busca transformar el mundo. Y como aquellos que dominan las herramientas de transformación digital son quienes ven a la tecnología como un socio estratégico, equiparar los conocimientos y preparar a los talentos para la transformación digital es el gran desafío de IBM. Con ese propósito es que IBM diseñó una plataforma de capacitación online que, a través de la Inteligencia Artificial de Watson, permite que cada uno de los 380 mil IBMers alrededor del mundo puedan acceder a un contenido personalizado acorde a sus necesidades, su rol. Estas sugerencias de la plataforma se actualizan periódicamente, porque el sistema trackea su huella digital y detecta sus aspectos a mejorar y ofrece capacitaciones internas o externas.
Es que la vida útil de las capacidades está cambiando, eso es una realidad. En el mercado se habla de cinco años; en tecnología este tiempo se reduce a tres. Pero para IBM este es un proceso que cada empleado debe atravesar año a año. Deben capacitarse y adaptar sus conocimientos al mismo ritmo que la digitalización. Se trata de que todos los “IBMeistas” adquieran las skills necesarias para cambiar la forma de trabajar, de aprender y de liderar.
El vertiginoso ritmo de los cambios en el mercado del trabajo, atizados por las tecnologías disruptivas, ha generado también nuevas necesidades en las empresas a las que IBM presta sus servicios. En el caso de Chile, ¿dan abasto sus “IBMeistas” ante tanta necesidad alrededor?
- Las necesidades y demandas de las empresas en Chile han cambiado, sin duda. A modo de ejemplo: los principales clientes han estado solicitando asesoramiento y expertise en temas de ciberseguridad. Muchas llamadas, muchas demandas ante esta necesidad.
Al mismo tiempo, en Chile, al igual que en el resto de América Latina, observamos una alta demanda de científicos de datos en Inteligencia Artificial (IA), desarrolladores de aplicaciones, DevOps, diseñadores digitales, gurúes en contenidos de transformación, CDO (Chief Data Officers), arquitectos cloud de infraestructura; especialistas en ciberseguridad, en marketing digital, ingenieros en robótica, etc., etc…. Y si miramos hacia atrás, estos roles no existían en un pasado cercano.
De nuestros archivos: Ana Paula Assis, IBM Latinoamérica: "El gran reto es hacer los cambios a la velocidad que el mercado exige".
- Como los expertos en estas nuevas tecnologías no son suficientes, ¿qué nivel de movimientos interempresas ha visto en el último año? ¿Qué tipo de profesionales, qué segmento etáreo es el más demandado, la vedette del momento?
- Los nuevos y jóvenes perfiles han crecido y madurado inmersos en la digitalización, influenciados por un flujo frenético de información, con tiempos cada vez más acotados para la toma de decisiones. Los trabajadores de niveles medios tienen un pie en el mundo digital y otro en el análogo, mientras que los más experimentados aún están aprendiendo como manejar dispositivos básicos.
En IBM valoramos a los perennials. En esta nueva categoría la edad es lo de menos: lo que importa es la actitud y la capacidad de aprender constantemente; crear cosas nuevas.
- A mediano plazo, lo que podría ayudar a saciar las nuevas necesidades tecnológicas del mercado del trabajo es que las universidades y los centros técnicos redefinan sus carreras y mallas curriculares. Por ejemplo, hace dos años no se hablaba del “data scientist” y hoy sí, porque es una necesidad de industrias con una vasta cantidad de datos. Entonces, ¿cómo evalúa el escenario educativo nacional, tomando en cuenta que, según el World Economía Forum, para 2030 el 65% de los jóvenes que hoy están en la educación primaria trabajarán en funciones que aún no existen?
- La transformación digital tiene un gran impacto en la educación y en la formación de futuros profesionales. Los institutos de educación superior en Chile ya están trabajando para acortar la brecha entre las demandas del mercado y las nuevas skills de los profesionales. Sin embargo, según informó la fundación Kodea, la brecha de talento digital en Chile alcanza a más de 16 mil personas que hoy carecen de las capacidades básicas en temas de interfaces móviles, IA, big data, redes sociales y blockchain.
Una de las instituciones más importantes de Chile, la Universidad Andrés Bello, ya está incluyendo programas para democratizar el acceso a la tecnología y nuevos modelos de educación personalizados que mejoran los resultados de los estudiantes y los preparan para las demandas laborales del futuro, incorporando tecnologías como IA, cloud, blockchain y ciberseguridad, que ayudarán a preparar el mercado de los futuros profesionales.
Pero preparar el mercado del trabajo para las nuevas tecnologías es responsabilidad de todos nosotros, no solamente de los centros educativos. Juntos, empresas, gobiernos e instituciones de enseñanza podremos preparar profesionales para resolver problemas complejos del mundo e impactar positivamente a la sociedad. En ese sentido, IBM Chile está ofreciendo una donación en horas de capacitación en la que estudiantes/ profesionales del país podrán acceder a contenidos gratuitos online sobre analytics, cloud, commerce, mobile, ciberseguridad, sistemas y Watson (IA).
“TALENTO A PRUEBA DE FUTURO”
- El gobierno de Sebastián Piñera acaba de lanzar el programa “Talento Digital para Chile”, que pretende cerrar la brecha digital de 16 mil chilenos y fomentar su empleabilidad en la economía del futuro. ¿Cómo ven desde IBM esta iniciativa? ¿Tienen pensado realizar un aporte a la formación digital de los chilenos?
- Vemos que este programa del gobierno está super alineado a nuestras iniciativas de aporte a la educación, con el mismo objetivo de acortar la brecha del conocimiento de los profesionales para los trabajos del futuro.
En IBM promovemos constantemente iniciativas para acortar la brecha digital y aportar a la educación del país. Y en el marco de su 90 aniversario en el país, IBM está poniendo a disposición horas de capacitación en formato online, gratuitas para profesionales de la industria de las Tecnologías de la Información. La iniciativa busca brindar a los especialistas del sector los conocimientos y habilidades del futuro, que les permitirán ser quienes profundicen el cambio digital en sus respectivas áreas.
En 90 años de historia de IBM en Chile, hemos trabajado desde la innovación para dejar un legado al país. Hoy más que nunca confiamos en que el camino de la digitalización es el futuro para Chile. Por eso esta donación en horas de capacitación es el puntapié inicial para comenzar a formar a los profesionales que liderarán la transformación digital en toda la región. Hoy, ellos necesitan reinventarse y acceder a nuevas herramientas para un mercado laboral más exigente. Al finalizar las capacitaciones, los profesionales recibirán una credencial digital que certifica el nivel alcanzado dándole un valor agregado a su carrera profesional.
Por otro lado, a nivel de educación técnica secundaria, IBM construyó en Estados Unidos un modelo que integra la educación secundaria con la educación superior y con experiencias de lugar de trabajo. En 2018, llegamos a más de 110 escuelas a nivel mundial, con más de 500 aliados corporativos en ocho países, dos de ellos en Latinoamérica, convirtiéndose en una verdadera transformación de la educación. Denominamos al modelo P-TECH, y hoy estamos en conversaciones para poder implementar el modelo en Chile.
- Fomentar la empleabilidad en la Cuarta Revolución Industrial implica también una educación continua, mediante plataformas digitales. ¿Cómo trabaja IBM la reinvención de sus “IBMeistas”, la necesidad de que asuman nuevos roles o focos profesionales?
- En las empresas es común asociar el término de learning con el de entrenamiento. En IBM vemos el área de learning como transformación cultural, un espacio para el desarrollo del nuevo modelo mental para el liderazgo, nuevas formas de pensar y capacidades del futuro. Por supuesto, muchas sesiones de entrenamiento son de aprendizaje o formación combinada, por lo que la interacción humana tiene vigencia. Muchas sesiones de entrenamiento se cierran en una jornada presencial con un facilitador, sin embargo, se abre un nuevo capítulo que debemos abordar y es el aprendizaje continuo y exponencial. Ahí, el aprendizaje digital y cognitivo juega un papel fundamental.
En IBM Latinoamérica contamos con un equipo de trabajo denominado Squad de Aprendizaje Exponencial, algo muy similar a una agencia de aprendizaje digital que trabaja fuertemente asociada con un equipo de analítica de aprendizaje. Así podemos monitorear el nivel de avance, la velocidad, las competencias desarrolladas y, en función de eso, podemos determinar las brechas. De esta forma, nuestro equipo de IBM diseña, planifica, ejecuta y monitorea en tiempo real cómo está ocurriendo nuestra propia transformación. Por ejemplo, lanzamos campañas de aprendizaje digital a través de nuestra plataforma cognitiva denominada “YourLearning”, ya que en esta plataforma -que está en la nube- es donde ocurre la reinvención personal. “YourLearning” se conecta con contenidos internos y externos a IBM, con otras plataformas dentro y fuera de la compañía; es escalable y con altísimos niveles de seguridad, lo que permite que nuestros profesionales descubran una experiencia extraordinaria e irresistible de aprendizaje, volviéndolo tan atractivo como cuando vemos series en plataformas on demand. Y al igual que estas plataformas, en IBM podemos observar el tráfico de nuestros usuarios de contenidos, y con ello entender cómo es su experiencia de aprendizaje, qué disfrutan más, qué credenciales digitales obtienen, dónde certifican sus nuevas capacidades. Así generamos, no solo nuevos conocimientos, sino nuevas competencias prácticas validadas por empresas que aprueban esa certificación. También, somos capaces de analizar la frecuencia de consumo, por lo que podemos entender y ajustar nuestra propuesta de valor para el aprendizaje y reinvención. Un algoritmo realiza recomendaciones de acuerdo con intereses y preferencias, y otro algoritmo -a medida que tiene cada vez más datos- ajusta el nivel de precisión del algoritmo anterior. De esta manera, impulsamos el desarrollo de aprendizaje de lo que nuestros profesionales desean y lo que el negocio necesita.
- El interés por nuevos conocimientos en las empresas debe comenzar por sus liderazgos. En su caso, a cargo de la operación Chile de IBM, ¿qué tema tecnológico le quita el sueño en estos momentos?
- Sin duda, el desarrollo profesional de nuestros “IBMeistas” y la contribución de IBM para acortar la brecha digital y de nuevas skills que se requieren en el mundo laboral de hoy.
Por otro lado: hybrid cloud. La nube híbrida es la apuesta de IBM para ayudar a nuestros clientes en sus procesos de transformación digital. Como “IBMeistas”, es nuestra obligación tener conocimientos profundos y estar permanentemente actualizados para ser referentes en el mercado.
La transformación digital está modificando las industrias y las formas del trabajo. Nuevas maneras de trabajo requieren de nuevas formas de pensar y liderar. Las tecnologías de vanguardia y, finalmente, tener una mente de crecimiento (growth mindset) será fundamental en la formación de los nuevos profesionales, pero también a lo largo de la vida. Para desarrollar capacidades continuas, poder operar nuevas tecnologías y construir lo que en IBM denominamos “talento a prueba de futuro”.