Los empleados que más rotan son principalmente hombres entre 25 y 35 años, según Michael Page.
La movilidad laboral se puede analizar desde diferentes perspectivas, siendo las más comunes el salario, el tipo de cargo, y las motivaciones a cambiar de trabajo. Por ejemplo, los gerentes de primera línea cambian en promedio cada cinco años, los de jefatura o cargos de coordinación lo hacen entre los tres y cinco años, mientras que aquellos que apuntan a personal de soporte duran entre seis meses y un año.
Según los expertos de Michael Page, compañía especializada en reclutamiento, los colaboradores que más rotan son “principalmente hombres entre 25 y 35 años con una movilidad del 25%. Y las mujeres de esa edad lo hacen en promedio un 21%. Mientras que dentro de este rango etario el cambio varía hasta en un 33% ”, explica Conzuelo Pi, Manager de Michael Page.
Para la experta, los factores que influyen en la rotación son los salarios desajustado en relación a los bajos promedios en comparación a otros mercados, la gestión de equipos, el estatus, el liderazgo organizacional, la autonomía y el tamaño de la empresa. Además, las compañías que más sufren este fenómeno son las industrias de retail, consumo masivo, servicios financieros y manufactura.
“Las consecuencias para las empresas pueden ser el desarrollo de talentos, la fuga de conocimiento específico, cambio en los niveles de productividad así como también en los programas de capacitación y en los costos de rotación (contratación, capacitación)”, aseguró Pi.
De acuerdo a cifras de la OCDE, Chile a pesar de que históricamente ha tenido tasas estables en cuanto a dinamismo laboral, es uno de los países con mayor movilidad con un 37%. “Cambiarse de trabajo en el momento indicado es sano, lo que hay que hay que cuidar es que el cambio sea una decisión con justificación y no que se tome de forma apresurada”, explicó Pi, agregando que “debido al escenario de incertidumbre económica en el que actualmente se encuentra Chile, los ejecutivos se demoran y les cuesta más decidir tomar una nueva oferta laboral.”
Por otro lado, la experta aseguró que la poca permanencia en el trabajo puede causar problemas a los colaboradores. “El constante cambio de una organización a otra podría afectar negativamente al trabajador si rotan de empresas en lapsos muy cortos de tiempo, lo que puede demostrar al empleador que el colaborador posee inestabilidad laboral , mala toma de decisiones, perfil mercenario, que solo le interesa el dinero o incluso, bajo compromiso organizacional del colaborador, entre otros”, concluye Pi.
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