La empresa Claro busca apurar la puesta en funcionamiento del servicio de TV satelital, ya que, una vez en marcha, al gobierno le resultará más difícil detener la iniciativa.

Ante la campaña iniciada por los canales privados para que el gobierno de Uruguay ponga freno a la instalación de nuevos competidores, la telefónica Claro ya empezó a publicitar un eventual servicio de TV satelital que, según afirman, estará funcionando en no más de 60 días.

“El tramite judicial a través del Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA), ya finalizó y resolvió devolver la licencia de DTH (televisión satelital directo al hogar), por lo cual en 60 días salimos”, escribió en su Twitter, Horacio Alvarellos, director general de la empresa de capitales mexicanos.

Este anuncio realizado se produce en momentos en que el gobierno analiza si enviar un proyecto de ley que prohíba a las empresas con licencias de telefonía móvil a operar en el mercado de la televisión. El objetivo del proyecto es evitar la propiedad cruzada y desestimular la concentración de servicios. Además, permite al Ejecutivo congraciarse con los canales privados, al quitarle competidores en el mercado de la TV para abonados.

La empresa Claro busca apurar la puesta en funcionamiento del servicio de TV satelital –para el que ya tiene permiso– ya que, una vez en marcha, al gobierno le resultará más difícil detener la iniciativa. No solo provocaría el malestar de las personas que  hayan abonado al servicio, sino también del gobierno mexicano con el que tiene firmado un Tratado de Libre Comercio.

El Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA) revocó una resolución del Ministerio de Industria del año 2009, que había dejado sin efecto la resolución que tiempo antes había emitido la Unidad Reguladora de los Servicios de Comunicación (Ursec) para autorizarle a Claro la transmisión de TV satelital en todo el país. Poco después, Movistar hizo saber de su interés por explotar el mismo servicio.

La Asociación Nacional de Broadcasters Uruguayos (Andebu) presentó ante la Ursec un documento en el que instó al gobierno a tomar las resoluciones administrativas necesarias para cerrarle el paso a las telefónicas Claro y Movistar al mercado de la TV satelital. Andebu considera que la presencia en el mercado de la televisión para abonados de una poderosa multinacional, afectaría gravemente a las pequeñas empresas de cable del interior del país.

“A corto plazo los usuarios podrían verse beneficiados con un servicio de menor costo (brindado por Claro y Movistar). Pero a largo plazo se estaría logrando la destrucción de un sector de actividad que ha hecho enormes inversiones en el país”, dijo el presidente de Andebu, Rafael Inchausti a El Observador.

Alvarellos, gerente de Claro, dijo en su cuenta de la red social Twitter, aludiendo a las empresas de TV por abonados nucleadas en Andebu que “quizá están nerviosos por qué tendrán que dar un mejor servicio para que sus clientes no migren a uno muy bueno realmente”.

“Claro adquirió los derechos exclusivos de los próximos Juegos Olímpicos de invierno y verano, a llevarse a cabo en Rusia (2014) y en Brasil (2016)”, añadió Alvarellos. Aseguró que en Uruguay se verán a través de Claro TV.