El gigante minorista ha conseguido una flota con cerca de 1.000 robots a cargo de labores de reposición y soporte. Lo anterior sin estar exento de polémicas al reemplazar el trabajo humano con dispositivos tecnológicos.
Uno de los retailer más grandes del mundo, Walmart, sumará robots de escaneo de productos a más de 650 tiendas en Estados Unidos para finales del trimestre, logrando una considerable flota de 1.000 androides. Los dispositivos, con 1.82 metros de altura, están equipados con 15 cámaras cada uno. La labor de los robots es enviar una alerta a los dispositivos manuales de los empleados cuando un producto está agotado en las góndolas.
Lo anterior ayudaría a subsanar uno de los problemas más importantes de las tiendas minoristas, problema que costaría casi US$1 billón anual, según IHL Group.
Diseñados por la empresa estadounidense Bossa Nova Robotics, estos robots se suman a una fuerza laboral cada vez más automatizada. Grupo robótico que también incluye dispositivos para limpiar pisos, descargar camiones y receptores de pedidos comestibles online.
De acuerdo con declaraciones del director ejecutivo de Walmart, Doug McMillon, son parte de una iniciativa financiera para reducir costos, mejorar el rendimiento de las bodegas y posicionarse como una empresa innovadora tecnológicamente hablando. Walmart explica que los escáneres de estantería podrían reducir tareas que en un momento tomaban hasta dos semanas en una rutina de dos veces al día.
Cada vez es más común encontrarse con robots que realizan tareas de reposición o identificación de productos en cadenas de supermercados rivales de Walmart, tales como Giant Eagle, Schnucks y Stop&Shop.
De acuerdo con datos de la misma empresa, los robots recorren un total de 80.500 kilómetros, llegando a escanear un millón de pasillos y cerca de 500 millones de productos. Según la empresa de robótica Simbe Robotics, proveedor de dispositivos de la competencia, explica que sus robots pueden reducir la cantidad de productos agotados en las góndolas hasta en 50%, aportando a reducir los costos laborales también.
Sin embargo, uno de los principales resquemores que tienen los empleados minoristas, almacenistas y dueños de tiendas al detalle, es la pérdida de empleos humanos producto de los robots. Y la preocupación es con justa razón: de acuerdo con un informe de mayo de los consultores de McKinsey & Co. reveló que aproximadamente la mitad de todas las actividades minoristas se pueden automatizar con la tecnología existente.
Desde Walmart han afirmado reiteradamente que sus robots permiten la reasignación de trabajadores a roles más significativos y no implican una eliminación directa de empleos.